Saludos desde una barca que navega sobre una Manhattan sumergida. Como ya hace tiempo que vengo leyendo diferentes obras del Hellboyverso en las que Mike Mignola ha sido guionista o ilustrador, tarde o temprano tenía ganas de leer alguna otra obra suya con elementos de misterio y toques paranormales, pero de un universo diferente. Y es así como llegué a "Joe Golem: Detective de lo oculto" que publica Norma Editorial, serie de la que os iré analizando las entregas que lea.
Joe Golem: Detective de lo oculto 1
Este primer tomo contiene dos pequeños arcos argumentales, titulados "El cazador de ratas" y "Los muertos sumergidos". Este inicio de serie nos sirve para presentar la Ciudad Anegada, el escenario en el que tendrán lugar las aventuras de Joe Golem, el personaje protagonista, y que no es sino la famosa zona de Manhattan sumergida bajo agua a raíz de un desastre. Pues bien, a lo largo del tomo no se explicará gran cosa sobre dicha catástrofe, pero sí se narraran varias aventuras en tiempo presente, al tiempo que habrá diversos flashbacks que, entre otras cosas, se centran en el pasado de Joe Golem.
La verdad es que el nombre de Joe Golem tiene todo el sentido del mundo, en especial si tenemos en cuenta que esas imágenes del pasado, son sueños que tiene Joe y que muestran la existencia de un golem al servicio de un párroco en una época muy anterior, en la que algunas criaturas malignas sembraban el caos en una población concreta. Así pues, mientras Joe va realizando varias investigaciones en esta obra, iremos teniendo esas piezas del puzle que nos harán ver la pasta de la que está hecho el personaje.
La sinopsis nos dice lo siguiente:
"Cuarenta años después de que una catástrofe sumergiera parte de Manhattan bajo diez metros de agua, la Ciudad Anegada es escenario de acontecimientos extraños que Joe Golem se dispone a investigar.
Una criatura tan misteriosa como terrorífica arrastra a los niños al fondo de los canales, y los fallecidos en las inundaciones regresan a la superficie… vivos."
La primera de las dos tramas, llamada "El cazador de ratas", empieza presentando ese escenario de la Ciudad Anegada, y poco después muestra al anciano detective Simon Church trabajando en su despacho, donde realizará un curioso hallazgo: una estatua del lugar cobrará vida. Habrá un salto temporal, y veremos por primera vez a Joe Golem observando la ciudad. Por otra parte, unos pequeños rateros cometerán un robo y escaparán a bordo de una barca de madera, pero no tendrán tiempo para muchos festejos por el botín obtenido, pues una extraña criatura marina secuestrará a uno de los niños. No tardará mucho en iniciar un investigación Joe, que es socio e investigador a cargo de Simon Church, y quien realiza toda la labor de campo, siendo Simon quien se ocupa de la parte más académica y técnica de cada nuevo caso.
Una vez que os he hablado un poco de la primera trama, la segunda, titulada "Los muertos sumergidos" se centra en una alerta sobre una actividad paranormal y potencialmente peligrosa que ha detectado Simon. Esta vez él acompañará a Joe a investigar más al respecto, y ese llevará al dúo a un edificio que alberga una espectacular colección sobre libros en materias de todo tipo, entre ellas las artes oscuras. El propietario de ese lugar está obsesionado con devolver a sus seres queridos a la vida, y en el transcurso de la trama se verá hasta qué punto está desesperado, y adónde está dispuesto a llegar para lograr su objetivo. Y hasta aquí es lo que puedo contaros.
¿Qué valoración merece el trabajo de los autores? A cargo de los guiones está el dúo formado por Mike Mignola y Christopher Golden (que ha trabajado en obras como "Baltimore" o "Buffy Cazavampiros"). Del primero he hablado tantas veces que no voy a incidir mucho en su trayectoria. A Golden lo conocía menos, por lo que esta lectura ha sido una toma de contacto con su narrativa. He de confesar que no es un cómic que me haya vuelto loco, las cosas como son, porque en el Mignolaverso este tipo de tramas están más que vistas, quedando la sensación de que esto no es lo mejor que ha hecho Mignola, y seguramente tampoco Golden aunque no le haya seguido la pista hasta ahora. Las dos historias iniciales no están mal, se leen rápido, es interesante que transcurran en una suerte de realidad alternativa por el hecho de mostrar un Manhattan sumergido en agua, y el toque de género negro mezclado con lo paranormal encaja bien. No obstante, me queda un regusto algo amargo, pues había buenos mimbres, pero apenas se le ha sacado jugo, o al menos no tanto como podría, a pesar de partir de elementos ya vistos en otras obras. Si bien el cómic se deja leer y me ha entretenido, he de resaltar lo ya dicho, y es que Mignola ha escrito cosas bastante mejores, y quizás este tomo satisfaga mínimamente a los que ya estamos en plan completistas del Mignolaverso (como un servidor), pero no sé si sorprenderá demasiado a otro tipo de lectores.
En el apartado gráfico está a cargo del dibujo Patric Reynolds (que ha trabajado en obras como "Prometheus: Fuego y Piedra" o "Serenity"), y he de decir que me ha parecido lo más flojo del tomo. No es que Reynolds sea mal dibujante, pero tiene un estilo que no me gusta, pues la mayoría de sus dibujos me han dejado la sensación de que, siendo un artista que se centra en los detalles de cada viñeta, tiene un trazo tan poco pulcro que la mayoría de veces todo se pierde en los colores oscuros, o queda un resultado tosco. Y otra cosa no, pero para una narración de este tipo, con el universo que se presenta, habría agradecido una persona ilustradora con un estilo artístico bastante diferente y más limpio, para disfrutar mejor del mundo submarino donde a veces se mete Joe Golem.
Sobre el color, Dave Stewart, esa pieza imprescindible del Mignolaverso, vuelve a hacer un buen trabajo, amoldándose al trazo del dibujante y ofreciendo una labor nuevamente satisfactoria. Por algo es uno de los mejores coloristas del gremio, al menos para quien os escribe estas líneas.
¿Merece la pena el cómic? Siendo honesto, SIN SER UNA MALA OBRA, TAMPOCO SOBRESALE, por lo que es recomendable tener las expectativas bajas por si luego os sorprende gratamente y lo disfrutáis más que yo. Quizás me esperaba algo más y de ahí mi decepción, pero no obstante, es un cómic con sus puntos de interés, que se lee rápido y no aburre, lo que juega a su favor. Aunque es cierto que es más recomendable a completistas del Mignolaverso, o gente que se sienta atraída por lo que pueda ofrecerles, ya que, aunque las dos tramas se cierran, se nota que hay una historia río abierta y se seguirá explorando. Y yo tengo bastantes dudas de si leeré el siguiente tomo. Por lo demás, la edición de Norma es de tapa blanda, pero trae de extras los habituales bocetos, diseños de personajes y comentarios de los autores.
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