Reseña de La Bestia. Una historia de animales desgraciados y de vidas que se entrecruzan para salvarse mutuamente

¡Huba! Una vez más, otro rato que me paso leyendo las historias del animal más conocido del ficticio país de Palombia. Una nueva ocasión de disfrutar, esta vez de una manera muy diferente a lo habitual, de otra versión que se ofrece de las peripecias de una de las grandes creaciones de André Franquin (1924-1997). Voy a hablaros de "La Bestia" de Editorial Base. 

Cabe decir que, en el momento en que he comenzado a escribir este texto, solamente hay publicado un primer tomo de esta serie en diferentes editoriales de Europa. Por ello todavía no puedo aventurar si estamos ante una historia que quedará cerrada en un par de tomos, o tendrá una mayor extensión. Ahora bien, por ser el inicio de una nueva versión del personaje, iré añadiendo aquí las diferentes entregas que se publiquen en España y pueda leer, para que tengáis un análisis más cohesionado. Esta obra vio la luz originariamente en 2020 a través de Dupuis y es Editorial Base, habitual hogar del marsupilami, quien en este 2022 la ha traído a España.

Este tomo, escrito por Zidrou (conocido entre otras por "Las nuevas aventuras de Ric Hochet" o "Shi") e ilustrado por Frank Pé (que ha hecho obras como "Little Nemo" o "Zoo") es el equivalente al "Una historia de Spirou por", una serie de historias de Spirou y Fantasio que están fuera de la continuidad de la cabecera de los personajes, como "Spirou y los Soviets" de la que os he hablado tiempo atrás. Es una forma de que, cada cierto tiempo, puedan disfrutar un poco de este universo personas que son novatas en él, o no llevan mucho tiempo siguiendo a estos iconos del cómic europeo. Pues bien, curiosamente en aquella serie de historias alternativas, apareció una llamada "La luz de Borneo", realizada por los mismos autores que han colaborado para escribir esta obra objeto de reseña. No es la primera publicación del marsupilami de este corte fuera de la continuidad, pues un gran ejemplo es "Marsupilami: Historias cortas por..." que precisamente reseñé en el blog. Ahora bien, el enfoque aquí es radicalmente más adulto e incisivo en un tema abordado antes con talante más humorístico, como es la esclavitud animal.

La Bestia 1

Aunque en alguna que otra ocasión se ha abordado el tema de la esclavitud animal en la serie del marsupilami o en algún recopilatorio de historias del mismo, es cierto que el enfoque que ofrece este tomo se desmarca un poco de todo lo anterior que un servidor ha podido leer. Sí que hay ciertas similitudes entre esta obra y la mencionada "La luz de Borneo", ya que uno de los personajes clave es un animal muy diferente de cualquier otro, y otro es que hay uno o dos personajes que conectan con dicho animal por diferentes razones emocionales. 

¿Cuál es la trama del cómic? La sinopsis dice lo siguiente:

"Un marsupilami es capturado en la selva de Palombia por los indios chautas y vendido a los traficantes de animales, que lo llevan a Europa. 

Pero se escapa del puerto de Amberes y llega a los suburbios de Bruselas, donde es acogido por François, un joven aficionado a los animales que tiene una vida bastante dura. 

Empieza una aventura fascinante que les conducirá a una gran amistad."

Este primer tomo comienza cuando se nos muestra un barco atracado en un puerto belga. En el interior de la enorme embarcación, iremos descubriendo que lo que transporta son animales exóticos, para comerciar posteriormente con ellos. Ahora bien, el capitán de la nave contará a su patrón que, por una avería que tuvieron días atrás, la travesía estuvo llena de percances, los cuales repercutieron especialmente sobre la mercancía. En diferentes páginas se verán muchos animales muertos o en estado deplorable. La visita terminará cuando el capitán llegue al lugar donde se encuentra el animal más extraño que hayan cazado antes. Dicho ejemplar conseguirá escapar, y entonces la acción se trasladará a otra parte. 

También se nos presentará al protagonista, un chico llamado François, que tiene problemas para encajar en su clase del colegio (sufre acoso por algunos de sus compañeros, que se ensañan con él por ser hijo de un soldado nazi), e intenta ser feliz dando acogida a cuanto animal desvalido que se encuentra por el camino. Esto es palpable cuando se enseñan los primeros planos de la casa donde vive con su madre, pues recuerda un poco al piso de Ace Ventura al estar lleno de animales de todo tipo y variedad, con la excepción de que la mayoría tienen alguna que otra discapacidad. Un día, tras una de esas jugarretas que le hacen los compañeros del colegio, François se escapará y se topará con un extraño animal que tiene un grave estado de salud. Será así como el marsupilami entre en su vida, y a partir de entonces nada será igual, para bien o para mal. 

¿Qué valoración merece el trabajo de los autores? No voy a ser yo quien os descubra a Zidrou, pues prácticamente es uno de los autores más reconocidos del cómic europeo. Ahora bien, hay que decir que, en lo concerniente a trabajo en esta obra, el mayor "pero" que se le puede achacar, es que lo que cuenta en estas casi 150 primeras páginas, se podría haber narrado en muchas menos. En ese sentido, es difícil saber hasta dónde puede estirar una historia que quizás no dé para tanto, al menos no en el planteamiento iniciado aquí. Por lo demás, se realiza una más que interesante perfilación de personajes principales, se muestra a un marsupilami taciturno y deprimido, radicalmente opuesto al carácter habitual de este animal. Esto conjuga muy bien con esa sensación que pulula en este tomo, en la que la mayoría de personajes no pasan por su mejor época, no son precisamente felices, pero son las pequeñas conexiones que se ven entre ellos, y su potencial futuro, lo que confiere cierto halo de esperanza a todo lo triste que debe pasar en sus vidas. El ritmo narrativo es pausado en la mayoría de tramos, aunque adquiere velocidad en tramos donde se necesita que así sea, y en líneas generales, y exceptuando la sensación de alargamiento artificioso de la trama, Zidrou realiza una buena labor. No notable o sobresaliente, pero sí solvente. 

El dibujo de Pé es una delicia. Con un estilo gráfico muy personal en los lápices, que se complementa con un coloreado en acuarela, las sensaciones que el ilustrador me transmite con su labor me han hecho rememorar necesariamente su genial trabajo en "La luz de Borneo", para comprobar que ambas obras son de alta calidad. Pé se maneja bien en las escenas calmadas, en las de acción, así como en la caracterización y expresividad de personajes, y realiza un muy buen diseño de todos los diferentes animales que habitan estas páginas. El marsupilami tiene un diseño diferente al habitual, no porque no conserve la esencia del diseño de Franquin, que sí lo hace, sino porque tiene los suficientes rasgos diferentes como para darnos cuenta de que esta no será una historia más, ni mucho menos una de corte humorístico.

¿Merece la pena el cómic? Estamos ante una OBRA QUE INTENTA CONTAR ALGO DIFERENTE DEL MARSUPILAMI, ahondando para ello en un mundo frío y triste, donde no es que no exista la alegría, pero donde hay que pasar por penurias y disgustos para comenzar a vislumbrarla. Para alguien como un servidor, que lee cuanto puede del marsupilami, ha sido una grata sorpresa, y quiero ver cómo sigue la historia. A diferencia de la serie regular del personaje, más orientada a un público infantil y juvenil, este tomo es bastante más adulto, y rompe un poco con ese público objetivo. Esto no es ni mejor ni peor, pero permitirá mejor a la persona decidir si darle una oportunidad o no a la obra. Es el primer tomo de una serie, y no tiene un final cerrado, por lo que sí es conveniente saberlo si se va a encarar esta lectura. 

En cuanto a la edición, es en una preciosa tapa dura de gran tamaño, ideal para disfrutar bien del arte de Pé. Y esto es todo por mi parte, a medida que pueda leer siguientes tomos, iré añadiendo sus reseñas a continuación.