¡Un saludo desde el cielo! Una vez más, he logrado que Cliff Secord me prestara su mochila cohete para darme un garbeo entre las nubes. En esta ocasión toca hablaros de lo que me ha parecido el cómic "Rocketeer: Aventuras" de Moztros.
Antes de hablar de la obra en sí, y para entender por qué el Rocketeer dejó una huella tan profunda desde sus primeras historias, toca repasar sus primeros años de vida. La primera historia del personaje creado por Dave Stevens (1955-2008) vio la luz en los primeros años de la década de los 80. Stevens era un artista polivalente que había entintado, ilustrado y coloreado obras con otros autores, pero con Rocketeer actuaba como autor completo. Es cierto que su trayectoria con el personaje fue un poco errante, pasando por varias editoriales, pero es innegable que había mucho potencial en ese creación. Una de las cosas que lo atestigua es que en 1991 apareciera la adaptación cinematográfica del cómic, siendo dirigida por Joe Johnston, en la cual tuvo una participación creativa el propio Stevens. Aquí en nuestro país también ha sido un poco errática la edición en castellano del material de cómic que había publicado en EEUU, pues fueron primero Zinco y Norma Editorial quienes se encargaron de ello, y es ahora Moztros quien, con mucha fuerza y varios proyectos que ya han visto la luz en España, se va a encargar de que no nos falten aventuras de este tipo.
El contenido de este tomo de aventuras son cuatro grapas americanas que vieron la luz en el 2011 a través de IDW Publishing. Cada una de esas grapas contenía varias historias cortas realizadas por multitud de artistas reconocidos del medio, los cuales podían aportar así su visión sobre el Rocketeer, o simplemente una manera en la que querían que lo disfrutásemos. Pues bien, teniendo en cuenta que en el 2012 se hicieron otros cuatro números también con mucha gente talentosa, y que todo este material de ambos años se recopiló en un tomo de tapa dura en 2017 también por IDW, cabe esperar que tarde o temprano nos llegue a España una continuación de esta primera recopilación que ha traído Moztros en 2023. En su día Norma Editorial publicó los dos tomos, así que espero que Moztros lo haga también.
¿Qué autores han participado aquí? La verdad es que son tantos que ponerlos aquí haría largo de leer este apartado, y en más de una ocasión quien guioniza se ocupa de la ilustración y hasta el color, pero os destaco figuras como las de Mike Allred, John Arcudi (del cual he reseñado muchas de sus historias en "AIDP" y "Abe Sapien"), Kurt Busiek, John Cassaday, Darwyn Cooke, Dave Gibbons, Ryan Sook, Dave Stewart (mi colorista favorito del Hellboyverso) o Mark Waid (que ya se ocupara de otra obra del personaje como "Rocketeer: Cargamento de la destrucción"). De la realización técnica se ocupa Germán D'Agostino, y traduce al castellano Rodrigo Díaz.
¿Qué historias nos encontraremos aquí? La sinopsis nos dice lo siguiente:
"Rocketeer, la creación más célebre de Dave Stevens, fue un éxito instantáneo apenas irrumpió en el mercado de los cómics a principios de la década de los ochenta.
Sin lugar a dudas, su arte exuberante y sumamente distintivo y la divertida historia repleta de acción inspirada en las novelas pulp de aventuras de la época en la que se desarrolla The Rocketeer fueron los factores más determinantes detrás de este fenómeno de prestigio y popularidad.
Sin embargo, Stevens solo pudo realizar dos novelas gráficas de Rocketeer (recopiladas en el álbum integral Rocketeer, de Dave Stevens publicado también por Moztros) debido a una enfermedad que interrumpiría su vida. Pero ahora, gracias a la cooperación de los herederos de Dave Stevens e IDW, llega esta antología con nuevas interpretaciones de Rocketeer realizadas por los mayores talentos artísticos de la actualidad: Mark Waid, Kurt Busiek, John Cassaday, Dawyn Cooke, Dave Gibbons, Mike y Laura Allred, Bruce Timm, John Arcudi, Tommy Lee Edwards, Scott Hampton, ¡y muchos más! Así que acerca una silla, siéntate un rato y... ¡descubre de nuevo a Rocketeer!"
Este tomo contiene doce historias cortas del personaje, las cuales pivotan sobre diferentes elementos claves de sus primeras historias, como son la valentía y temeridad de Cliff Secord, su carácter infantil, posesivo e inseguro respecto a su relación con Betty y la forma en que otros hombres intentan conquistarla, así como sacar de apuros a la mencionada mujer, o la existencia de personas que quieren hacerse con la mochila cohete para sus propios fines. En líneas generales, y aunque cada historia corta es la voz de su guionista, y está ambientada en un año u otro diferente, las narraciones más o menos contienen los elementos antes mencionados, en mayor o menor medida. Es lógico que, si todo eso hizo que el Rocketeer despertara pasiones desde sus inicios, tanto en la adaptación cinematográfica de sus aventuras, como ahora en este tomo, se conserve el esquema inicial de sus peripecias.
No quiero destriparos todo lo que os encontraréis aquí, por lo que hablaré de unas pocas historias que me han resultado más llamativas, aunque el nivel general del tomo es notable y no es tan fácil quedarse con unas pocas narraciones, sino que las he disfrutado todas. Ahora bien, las imágenes que veis en la reseña pertenecen a la primera de las aventuras del Rocketeer, en la cual el personaje deberá rescatar a Betty, que ha sido secuestrada por unos delincuentes. Cliff se verá obligado a pensar rápido para salir del atolladero, pues no solamente deberá salvar a su novia, sino que será lanzado un misil que podría causar muchos daños si impacta en una zona poblada. ¿Logrará el héroe salir del apuro exitosamente, o solamente salvará a Betty, o detendrá el misil?
Otra historia interesante tiene como principal protagonista a Betty, la cual está en contacto con Cliff a través de cartas que se intercambian entre ellos, ya que él se encuentra en esta ocasión luchando en la Segunda Guerra Mundial, donde hace heroicidades como Rocketeer. Así pues, la correspondencia entre ambos abarca unos años, en los cuales Cliff le va contando algunas de las cosas que hace en el frente, mientras ella sufre porque no sabe si, tarde o temprano, su novio volverá de la gran guerra. Y una tercera historia que me apetece destacar, tiene que ver con el auge de los cómics, pues Cliff es incapaz de verle encanto a este tipo de lecturas, y considera que su papel como el Rocketeer también es igual de heroico que el de los personajes de las viñetas. Tendrá que intentar salvar a un actor que, disfrazado de superhéroe, será atacado por alguien que quiere matarle. ¿Logrará Cliff que la gente deje los cómics y valore sus hazañas?
¿Qué valoración merece el trabajo de los autores? En obras de este tipo, que recopilan la labor de muchas personas, es difícil hacer valoraciones individuales, o al menos prefiero hacerlas de forma genérica. Claro que tengo mis historias favoritas que destacaría por sus guiones, pero en líneas generales, y teniendo en cuenta que en todos los capítulos las peripecias de Cliff Secord mantienen la esencia de todo lo que le hizo destacable desde sus orígenes, he disfrutado bastante de cuanto podía ofrecerme cada escritor. No deja de ser una bonita oportunidad de disfrutar del Rocketeer a través de la visión y el cariño que cada artista tiene por la gran creación de Dave Stevens, y el hecho de que las historias sean cortas, hace que sea imposible aburrirse. Cabe señalar finalmente que, de las doce aventuras, una de ellas no es en formato cómic, sino que es un relato con ilustraciones, y puede gustar más o menos, pero es una variación de la fórmula mayoritaria en el tomo.
Respecto al trabajo de los ilustradores, quizás aquí si tiendo a disfrutar más del tipo de dibujo que tienen unos artistas u otros, pero lo bueno que veo en las recopilaciones de historias es precisamente eso, tener variedad para que, a pesar de narrarse aventuras de un mismo personaje, cada autor aporte una visión diferente. También entran en juego las preferencias personales, pues soy gran fan del trabajo de Cassaday y me ha encantado su aportación, pero igualmente me han dado un gran disfrute los lápices de Darwyn Cooke, Chris Weston, Ryan Sook o Michael Wm. Kaluta. Hay algunos tipos de dibujo que no me han entusiasmado tanto o no asocio demasiado con lo que piden las aventuras del Rocketeer, pero al ser la forma en que cada persona ha querido rendir su homenaje al legado de Stevens, me parece que todos los tipos de trazo han merecido la pena.
Respecto al color, salvo una historia que es en blanco y negro y otra que parece coloreada con acuarela, el resto mantienen una coherencia visual que se agradece, porque facilitan el hecho de sintamos más orgánica la recopilación de historias, y las paletas usadas son de estilo clásico, lo cual es indispensable para un contenido ambientado en la década de los 40.
¿Merece la pena el cómic? No puedo decir nada más que INDUDABLEMENTE SÍ, estamos ante un tomo que recomendaría encarecidamente a los fans del Rocketeer, pero también a quienes no hayan tenido nunca contacto con él, pero tengan curiosidad y quieran remediarlo. Aventuras por doquier, carisma a espuertas y mucho amor por el personajes es cuanto os encontraréis aquí. Yo he disfrutado un montón, y estoy deseando que salga el otro tomo por seguir viendo el trabajo de otros autores con este juguete.
Por último y respecto a la edición de Moztros, es un bonito tomo de tapa dura que trae como contenido extra un montón de ilustraciones, tanto de Dave Stevens como de otros artistas. Y esto es todo por mi parte, si queréis ver más reseñas mías podéis hacerlo aquí. ¡Hasta otra!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si has llegado hasta aquí, significa que has dedicado un tiempo a leer estas líneas. Gracias por hacerlo. Adelante, ahora no seas tímid@ y cuéntame tus impresiones al respecto. De igual modo, te animo a compartir este texto con más gente para que llegue lo más lejos posible.