¡Un saludo desde los cielos! Aquí me tenéis, usando la mochila cohete (la del mapache Rocket no, la otra famosa) que Cliff Secord me ha prestado para haceros este nuevo análisis de cómic. Vengo a hablaros de mis impresiones tras leer "Rocketeer: Cargamento de la destrucción" de Moztros.
Antes de hablar de la obra en sí, y como ya hice con la anterior reseña dedicada a una obra del personaje, toca repasar sus primeros años de vida. La primera historia del personaje creado por Dave Stevens (1955-2008) vio la luz en los primeros años de la década de los 80. Stevens era un artista polivalente que había entintado, ilustrado y coloreado obras con otros autores, pero con Rocketeer actuaba como autor completo. Es cierto que su trayectoria con el personaje fue un poco errante, pasando por varias editoriales, pero es innegable que había mucho potencial en ese creación. Una de las cosas que lo atestigua es que en 1991 apareciera la adaptación cinematográfica del cómic, siendo dirigida por Joe Johnston, en la cual tuvo una participación creativa el propio Stevens. Aquí en nuestro país también ha sido un poco errática la edición en castellano del material de cómic que había publicado en EEUU, pues fueron primero Zinco y Norma Editorial quienes se encargaron de ello, y es ahora Moztros quien, con mucha fuerza y varios proyectos que ya han visto la luz en España, se va a encargar de que no nos falten aventuras de este tipo.
Pues bien, la obra que nos ocupa vio la luz a través de IDW Publishing en el año 2012 en cuatro grapas, las cuales se recopilaron en tomo al año siguiente. Moztros nos lo ha traído en español en 2023, en ese proyecto que os comentaba de ir recuperando material del personaje que podamos disfrutar. Se trata de una aventura autoconclusiva, si bien se dejan algunos hilos sueltos por si había una continuación. He intentado averiguar si efectivamente la hubo, pero no, pues el mismo guionista hizo otras obras posteriores con el mismo personaje, pero no parece que ninguna fuera la secuela de ésta, salvo que en esos casos mencionados se retome lo que queda pendiente aquí. En cualquier caso, el cómic objeto de reseña es una oportunidad de que los fans del Rocketeer podáis disfrutar nuevamente de sus andanzas.
¿Qué autores han participado aquí? De los guiones se ocupa el veterano Mark Waid (entre otras muchas cosas, famoso por su etapa con "Flash" o por "The Unknown"), mientras que le acompañan Chris Samnee (en su trayectoria figuran "El poder del fuego" o "Viuda Negra" donde ya trabajó con Waid) al dibujo, y Jordie Bellaire (le avala su labor en "Britannia" o en "La Visión"). De la realización técnica se encargan Juan Pablo Marse y Germán D'Agostino. Traduce al castellano Rodrigo Díaz.
¿Qué historia tenemos aquí? La sinopsis dice lo siguiente:
"¡Atención! Un barco acaba de atracar en el puerto de Los Ángeles llegando desde un lugar lejano y exótico, ¡con un cargamento misterioso y que podría estar vivo! ¡El peligro y la destrucción comienzan a abundar cuando nuestro héroe salta a la refriega!
Además, ¡hace su presentación un encantador personaje nuevo que competirá contra Betty por el afecto de Cliff!"
En esta obra aparece desde el principio el personaje de Sally, la sobrina de Peeves (para quien no lo conozca, el mejor amigo de Cliff, además de su mecánico), quien está intentando volar con el aparato de su tío y Cliff. Y digo intenta porque su acompañante querrá propasarse con ella, y eso dará lugar a que el avión termine sufriendo un percance que pondrá en peligro sus vidas. Será entonces cuando el Rocketeer tenga que hacer su primera aparición en el cómic.
Por otra parte, un barco estará en el puerto de Los Ángeles, y pronto se intuirá que la carga que lleva no es precisamente inocua. Aparecerá un personaje llamado John Sunli que dará buena cuenta de lo peligroso de la carga que hay en la bodega del barco, y además demostrará un creciente interés en cuanto descubra que uno de los marineros conoce información relativa al Rocketeer. Será entonces cuando comenzará a formarse una nueva amenaza en la vida de Cliff.
Es difícil saber hasta dónde contaros de la trama, porque el cómic, a pesar de constar de cuatro capítulos, tiene una historia tan simple y corta que se podría haber contado en bastante menos espacio. Pero sí puedo adelantaros que Betty, la novia de Cliff, se sentirá celosa cuando vea la manera en la que Sally admira y trata a su novio. Al mismo tiempo, vendrá un inspector de la Agencia Aeronáutica Civil de cuya valoración dependerá el futuro del trabajo de Cliff y Peeves, y tarde o temprano se producirá el inevitable encontronazo del héroe con la carga del barco, descubriendo que allí hay un peligro enorme en potencia para la ciudad de Los Ángeles.
¿Qué valoración merece el trabajo de los autores? Habitualmente disfruto mucho de los guiones que suele escribir Waid, que es prácticamente una leyenda en el cómic de superhéroes y ha estado tanto en DC como en Marvel. Ahora bien, aunque aquí consigue una historia entretenida y que se lee de un tirón, no pasa de ser un trabajo en piloto automático. La trama en sí se estira demasiado para abarcar cuatro números cuando no daba para tanto, hay poco tratamiento y un tanto plano de personajes más allá de las rabietas de Betty, los sentimientos de Sally y el habitual carácter despreocupado de Cliff. Los villanos prácticamente no tienen profundidad y sus objetivos están ahí porque se nos cuenta, pero no tienen desarrollo. Hay alguna escena que me choca bastante, como cuando Los Ángeles está siendo atacada por dinosaurios, y un montón de gente en peligro que debería estar huyendo, tiene lugar de pararse (una mujer incluso con sus bolsas de la compra) hablar y sonreír al Rocketeer porque les está ayudando con esas criaturas. Cosas como estas hacen que el trabajo de Waid, que es entretenido y dinámico porque el ritmo del cómic es rápido, no pase de correcto, especialmente sabiendo que este guionista es capaz de mucho, pero que mucho más.
La misma valoración hago de la labor de Samnee en el apartado gráfico. Es un dibujante cuyo estilo caricaturesco y cartoon me suele gustar, pero por alguna razón, teniendo en cuenta el trazo limpio, perfeccionista y lleno de vida que tenía Stevens, me ha sido inevitable hacer una comparativa donde Samnee pierde de calle. Tiene algunas viñetas bastante confusas en lo que sucede, y quizás su forma de trabajar no encaja demasiado, o al menos no me ha encajado a mí, con las aventuras del Rocketeer, de corte más clásico y pulp, desentonando un poco el toque desenfadado y casi de serie de dibujos animados. Con otro ilustrador habría sido mucho más impactante toda la parte de los dinosaurios recorriendo Los Ángeles por ejemplo. Ahora bien, tal como decía de Waid, Samnee está correcto, pero lejos de sus mejores trabajos.
El color de Bellaire está a buen nivel, teniendo en cuenta que también he visto otros trabajos suyos y también suele ser sinónimo de calidad, por lo que no me esperaba menos, usando una colorida y vivaz paleta de colores durante los cuatro números.
¿Merece la pena el cómic? Siendo sincero, NO ES EL MEJOR CÓMIC QUE PODÁIS LEER DE ROCKETEER, PERO SÍ ES ENTRETENIDO. Se lee de un tirón y sus autores, estando lejos de su mejor forma, sí que hacen un trabajo correcto dentro de lo que suele hacer cada uno. Aunque no deje gran poso, no es una mala aventura para evadirse un rato y ver de nuevo a Cliff Secord en acción, aunque no es el mejor cómic que podáis leer del personaje como sí era por ejemplo "
Rocketeer: Las historias completas" con todo el material de Dave Stevens. Recuerdo que es una obra autoconclusiva, aunque deja algún hilo del que tirar en una posible secuela, si algún día llega.
Por último y respecto a la edición de Moztros, es un bonito tomo de tapa dura que trae como contenido extra todos los bocetos de Samnee de los cuatro números que componen la obra, y algún otro de cubiertas. Está el cómic disponible tanto en este formato como en otro metalizado. Y esto es todo por mi parte, si queréis ver más reseñas mías podéis hacerlo
aquí. ¡Hasta otra!
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