Reseña de Cazafantasmas 3: América encantada. Recorriendo el país para librarlo de amenazas paranormales

Saludos desde el reino de lo paranormal. Si veis algo raro en vuestro barrio o en vuestros hogares, tened el teléfono a mano para usarlo, pues han vuelto a la acción los... ¡Cazafantasmas! Aunque quizás tarden un poco en llegar para socorreros, pues esta vez el peculiar grupo de investigadores de lo paranormal abandona su entorno habitual de Nueva York para recorrer el país en una caravana. Y aquí me tenéis, para contaros qué me ha parecido "Cazafantasmas 3: América encantada" de Fandogamia Editorial.

Siguiendo el proceso habitual, este cómic fue publicado originariamente por IDW Publishing, y posteriormente nos llegó a tierras españolas allá por el 2018 gracias a Fandogamia. Estamos ante la tercera parte de un primer volumen de las aventuras de los personajes, ya que más allá de éste, la editorial española solamente ha publicado otro más. Pues bien, en los anteriores arcos argumentales, "El hombre del espejo" y "El lugar más mágico de la Tierra", los Cazafantasmas fueron ampliando su campo de acción habitual, pues pasaron de resolver sucesos paranormales en las calles de Nueva York, a hacer frente a una poderosa entidad fantasmal que poseyó un parque de atracciones. Tenía lugar una tendencia que iba llevando a los personajes cada vez más lejos de su hábitat natural por así decirlo, y en este tomo eso se confirma, pues el cuarteto de cazadores de fantasmas recorrerá Estados Unidos en caravana. 

Y ojo, que no se trata de una simple visita turística al país, cumpliendo ese cliché americano de recorrer el país en caravana. Los Cazafantasmas, al más puro estilo de "El Equipo A", irán resolviendo problemas relacionados con entidades fantasmales en diferentes ciudades del país, donde se les ha contratado para trabajar. Y todo esto viene a colación de lo que se ha ido desarrollando en la colección hasta este tomo, ya que los Cazafantasmas trabajan para una división del Ayuntamiento dirigida por el chupatintas Walter Peck, que es quien en ocasiones decide dónde y cuándo deberán entrar en escena. Especialmente si hay dinero de por medio. Así las cosas, me ha gustado mucho que la narración se expanda a lo largo de un país, porque permite ver algo más de su historial paranormal, aunque en algunos casos ya sea conocido por todo el mundo como el famoso incidente en Roswell, pero con una vuelta de tuerca para adaptarlo al interés de la narración. 

¿Qué autores han participado en este tomo? Sigue el mismo equipo creativo que en el tomo anterior. Es decir, como guionista está Erik Burnham (ha participado en "Araña Escarlata: La caza" o "Regreso al Futuro: Ciudadano Brown"), siendo el ilustrador Dan Schoening (muy asociado a obras de estos personajes como "Transformers / Cazafantasmas" o la reseñada en el blog "Cazafantasmas / Tortugas Ninja"), quedando el color para Luis Antonio Delgado (que ya desempeñó este rol en "Cobra Kai: La saga de Karate Kid continúa. La historia de Johnny", o en "Underworld: Ryse of the Lycans"). Vuelve a participar Tristan Jones (que participó en "Lazarus. X + 66" y dibujó "Silent Hill: Downpour: Anne's Story"), que escribe e ilustra una historia de complemento. La traducción corre a cargo del habitual de la serie, Cristian Timoneda.

¿Qué historia nos encontraremos aquí? Pues bien, os dejo la sinopsis editorial:

"Nueva York no tiene el monopolio de lo sobrenatural... ¡ahora la energía psicokinética se expande por todo el país!

Este tercer volumen de la serie regular lleva a los chicos a aventurarse más allá de los límites de la gran manzana. Detroit y un ejército espectral; Nueva Orleans y una antigua y poderosa reina vudú; Roswell y su base aérea; y Seattle y un músico maldecido serán las misiones a las que tendrán que hacer frente con su equipamiento y gracia habitual.

Además, incluye el extra “¿Quién mato a Laura Parr?” que narra una aventura en solitario de Peter Venkman."

Desde las páginas iniciales la acción se aleja del todo de la ciudad de Nueva York, habitual escenario en los volúmenes anteriores, ya que Walter Peck ha cerrado una serie de contratos para que los Cazafantasmas actúen por el país. Es algo que el alcalde de Nueva York no ve con muy buenos ojos dada la gran cantidad de trabajo de los Cazafantasmas en la ciudad, pero el saber que su periplo por Estados Unidos le reportará beneficios económicos, hará que cambie de opinión. Claro que, como se sabrá llegado cierto momento del cómic, la actividad sobrenatural aumentará mucho en la ciudad que nunca duerme, confirmando la peligrosidad de la decisión que tomó Peck al mandar fuera a sus mejores expertos en temas paranormales.

Mientras esto sucede en Nueva York, los Cazafantasmas realizan en caravana su viaje por distintas ciudades del país, siendo la primera parada Detroit. Aquí tendrán que enfrentarse a un ejército de ultratumba. Pero eso no será todo, pues en Nueva Orleans se verán involucrados en una trama familiar donde tendrá gran importancia Marie Laveau, la reina vudú de la ciudad. Por otra parte, en Roswell aparecerán una pareja de agentes federales que sin lugar a dudas son un homenaje a Fox Mulder y Mónica Reyes (quien relevara a Dana Scully durante un tiempo), personajes de "Expediente X". Y por último, será en Seattle donde los Cazafantasmas tengan que investigar unos casos de combustión espontánea relacionados con la música. 

Vaya por delante que me ha gustado mucho el enfoque de la narración, ya no se trata del hecho de que la línea argumental haya alcanzado una progresión lógica al sacar a los personajes de su zona habitual de trabajo, sino que además se realiza con acierto. Las diferentes amenazas que se van encontrando tienen interés en un sentido u otro, y no es difícil reconocer cosas que incluso una persona sin mucho conocimiento de lo paranormal sabe, como la mitología que siempre ha existido sobre el suceso de Roswell, o la fuerte presencia del vudú en Nueva Orleans. Además, hay momentos de lucimiento para todos los personajes, dando una sensación más coral en este tercer volumen, pues anteriormente algunas subtramas se centraban en uno solo de los integrantes de los Cazafantasmas. Sí que hay una historia protagonizada íntegramente por Peter Venkman (que por cierto, bebe mucho de "El diablo sobre ruedas" de Steven Spielberg), pero es un complemento de la serie principal, por lo que no la incluyo en el análisis que he hecho hace unas líneas sobre el reparto del protagonismo. 

¿Qué valoración merece el trabajo de los autores? Respecto al guion de la serie principal, Burnham sigue dejándome buenas sensaciones, pues se nota no solamente que le gusta contar las historias de los Cazafantasmas, sino que además les tiene tomada la medida. Cada capítulo tiene la habitual mezcla de amenaza paranormal con un poco de humor e investigación sobre el fenómeno, y los personajes tienden a ser y actuar como lo hacían en las películas, lo que otorga una mayor coherencia a este universo expandido. Además, el ritmo narrativo es muy fluido. Por otra parte, la historia de complemento que escribe Jones también me ha gustado, pues completa el hueco narrativo que quedaba entre dos de los capítulos principales, cuando Venkman hacía una parte del viaje en coche y no en la caravana con los demás. 

En cuanto al dibujo de Schoening, me voy a repetir pero le sucede lo mismo que a su compañero guionista, pues se nota que el ilustrador ya le ha cogido el punto a los personajes, y su estilo cartoon fluye con naturalidad, viéndose enriquecido por esos huevos de pascua que encontramos aquí y allá, bien en forma de objetos en las viñetas, o en el caso de personajes, como el diseño de los agentes del FBI que tanto recuerdan a los de "Expediente X". Queda añadirle a eso la siempre eficiente creación de las entidades paranormales, y la constante sensación que tiene uno leyendo este cómic de que podría ser un episodio de una serie de dibujos. Y en cuando a la aportación de Jones con su historia de complemento, tiene un estilo que poco se parece al de Schoening y resulta un tanto sucio, pero tampoco está mal del todo.

Queda hablar del color, y se aplica lo de donde caben dos caben tres, porque Delgado también se encuentra en ese punto en el que su labor de colorista se complementa muy bien con las del resto de autores, y la gama de colores y tonos usados se amoldan muy bien al trazo de Schoening.

¿Merece la pena el cómic? ¿Cómo se me ocurre preguntar esto? Claro que SÍ. Lo sé, como fan de los personajes mi opinión estaba un poco condicionada desde el principio, pero me sigue resultando muy interesante y divertida esta colección de los Cazafantasmas, y creo que no os defraudará a quienes la estéis siguiendo, o bien puede dejaros con ganas de más si os subís al carro en esta ocasión. Queda tan solo un tomo más para cerrar la colección hasta donde lo publicó Fandogamia, y sin duda este tercero me deja con ganas de más, en especial sabiendo que lo próximo será el retorno a Nueva York, donde habrá nuevas amenazas que afrontar.

Por otra parte, y sobre la edición de Fandogamia, el cómic es del habitual formato rústica, y como contenido extra trae las portadas de los números, hechas por Jones. Y esto es todo por mi parte, si queréis ver más reseñas mías, podéis hacerlo aquí. ¡Hasta la próxima y tened cuidado con cualquier presencia paranormal a vuestro alrededor!