Saludos ciudadanas y ciudadanos de Mega-City Uno. No es ningún secreto que soy todo un fan del Juez Dredd, el mítico justiciero del cómic británico. Lo atestiguan no solamente la guía de lectura que he elaborado, sino también las múltiples reseñas de cómics que he hecho de diversos títulos y podéis encontrar en este blog. Y una de las líneas de reseña en la que me he centrado dentro de este personaje, es la correspondiente a sus aventuras en orden cronológico desde que comenzó su publicación editorial. Hoy toca que os hable de "Juez Dredd: Los archivos completos 04" de Ediciones Kraken.
Este cuarto tomo de los archivos cronológicos del personaje abarca del año 2102 al 2103 de su calendario ficticio, y recopila los progrs 156 a 207 publicados en la revista 2000 AD. Curiosamente, y aunque en el tercer tomo apenas había tramas especialmente extensas, aquí se vuelve a repetir la dinámica del segundo tomo, donde tuvieron lugar un par de arcos argumentales de gran duración. En ese sentido, abarcando alrededor de unas 175 páginas, y repartida en 26 capítulos, se narra la trama del Juez Niño, un personaje que hará su aparición en el universo de Dredd, y que, a tenor de la predicción de un juez psíquico, jugaría un papel crucial unos cuantos años más adelante, cuando tenga lugar una especie de apocalipsis en la Mega-City Uno. Según la predicción, dicho Juez Niño, que tiene poderes para ver el futuro, ejercería de líder de la población, y lograría guiar con éxito a la gente para afrontar ese posible desastre. No se menciona que sea algo que vaya a suceder sí o sí en el futuro, pues a fin de cuentas es algo visto en una predicción, y esto no es algo infalible. Pero eso poco importará, pues el Juez Dredd llevará a cabo la búsqueda de este niño, lo cual le hará recorrer gran parte de la galaxia.
Aunque Dredd no tendrá mucha información sobre el aspecto del niño, sí sabrá lo más importante: lleva grabada en la cabeza una marca con forma de águila. Como el águila forma parte del sistema de justicia y es una representación animal del mismo, no será de extrañar que precisamente dicho niño tenga una marca así en el rostro. Pero ya puedo adelantar que no será una búsqueda sencilla, pues Dredd tendrá que ir constantemente a rebufo del destino que va sufriendo dicho niño. Esto hará que el personaje deba viajar por diferentes planetas de la galaxia hasta poder estar cerca de encontrar a quien busca, y, como podéis imaginar, eso será un buen pretexto para que Dredd viva toda una serie de diferentes experiencias, habida cuenta de que, aunque termine visitando otros planetas, siempre estará dispuesto a impartir la justicia que pueda. Por si esto no fuera poco, tarde o temprano se cruzará en su camino la peligrosa familia Ángel (personajes que, aunque brevemente, aparecieron en la adaptación del Juez Dredd protagonizada por Sylvester Stallone), quienes secuestrarán al niño por sus poderes de ver el futuro. Esto y mucho más, de lo que hablaré más adelante, es lo que hallaréis en este tomo.
¿Qué autores han participado aquí? En este tipo de tomos recopilatorios siguen figurando muchos artistas, como los escritores John Wagner (co-creador del personaje), Alan Grant o Kelvin Gosnell. En la nómina de ilustradores figuran algunos ya veteranos del Juez Dredd como Brian Bolland, Ian Gibson, Mike McMahon o Ron Smith, y aparecen también los trabajos de Steve Dillon o Brett Ewins. La traducción al castellano corre a cargo de Marcos Randulfe.
¿Qué historias nos encontraremos aquí? Cabe recordar que todos los progs contenidos aquí son en blanco y negro, y que, al margen de la gran historia central, habrá muchas de lo más variado. La sinopsis dice lo siguiente:
"La crónica futurista del policía Juez Dredd continúa en esta cuarta parte, que recopila cronológicamente sus más arriesgadas aventuras aparecidas en la clásica revista 2000AD.
En este número aparece la saga clásica del Juez Niño."
Será la primera historia de todas la que directamente entre al trapo, presentando el inicio de este gran arco argumental. Con unas pocas páginas, y aunque inicialmente Dredd aparecerá en medio de otro planeta, se nos pondrá al día de los acontecimientos, arrancando todo con la predicción de un juez psíquico. Dicho juez, cuyas predicciones suelen resultar acertadas en un alto porcentaje, ha previsto que, dentro de bastantes años, la Mega-City Uno vivirá una especie de apocalipsis que podría acabar con todo.
Tal catástrofe no es inevitable, pues en la predicción aparece la figura del Juez Niño, quien guiaría a la mega urbe hacia la salvación. Siendo conscientes de que el juez psíquico no es infalible, pero sí ha tenido razón en muchas ocasiones anteriores, será el Juez Dredd quien se lance sin pensarlo a buscar a dicho niño. Eso le llevará a recorrer muchos planetas, inicialmente en solitario, y posteriormente acompañado de otro grupo de jueces, quienes se sumarán a la búsqueda a bordo de la nave espacial Justicia 1. Detalle importante aquí es el hecho de que aparecerá por primera vez el personaje de la Jueza Hershey, quien ya tuvo su aparición en la misma película del Juez Dredd donde estaba la banda del Ángel. A lo largo de toda esta gran historia, Dredd, además de visitar Texas (donde también hay jueces) vivirá situaciones tan peculiares como conocer a la secta de la basura, formar parte de un juego de guerra entre razas, ver a un hombre enfermo perder poco a poco partes de su cuerpo, o incluso ser víctima de un extraño comerciante espacial. Así pues, tardará en localizar a su objetivo, y una vez esté cerca, deberá hacer frente a la banda del Ángel, quienes tienen en su poder al chico.
Una vez terminada su epopeya galáctica, y ya de regreso en la Mega-City Uno, Dredd deberá lidiar con algunas consecuencias de su misión, pero también será necesaria su pericia para afrontar nuevas amenazas criminales. Otra cosa no, pero el crimen nunca duerme en este mundo, y Dredd es prácticamente lo más parecido a una deidad justiciera, pues es omnipresente y se ocupa de resolver la mayor parte de situaciones peligrosas. Por lo tanto, una vez concluido todo lo referente al Juez Niño, habrá una nueva ración de historias criminales en las calles de la mega urbe, donde Dredd está en su salsa. Entre motos legisladoras fuera de sí, guerras de bloques, personas involucionando a monos, programas televisivos que incitan a la comisión de crímenes y otro tipo de situaciones, me ha resultado agradable encontrar un gran punto de conexión con el tercer tomo de archivos completos... ¡Otto Séptico! En una surrealista historia (marca de la casa en este mundo tan cínico y satírico), Otto Séptico, ex-concursante de un programa donde cada invitado debía dar la máxima pena posible a los telespectadores, logró hacerse rico y tuvo la brillante idea de montar "clínicas de fealdad", donde él mismo se encargaba de realizar operaciones de fealdad a la gente, o donde se comercializan una serie de productos destinados a afear el aspecto de las personas. Y como podéis intuir... ¡es un éxito, pues todo el mundo quiere ser especial, y se dan cuenta de que llamarán la atención siendo aberraciones andantes! Por lo tanto, con lecturas tan descacharrantes como ésta, me lo paso en grande.
¿Qué valoración merece el trabajo de los autores? En los guiones sigue llevando casi todo el peso de las historias Wagner, aunque poco a poco se irá introduciendo de forma estable Grant, otro de los pilares sobre los que se ha cimentado el universo Dredd. Una de las virtudes que veo en esta parcela, es el hecho de que, esté quien esté al frente de la narrativa, la sensación de coherencia es la misma en las diferentes historias que uno pueda leer, y no se nota el hecho de que cambie la persona que se ocupa de relatar las peripecias de Dredd. En todo el tomo sigue presente ese espíritu satírico que tanto caracteriza a este universo, y hay constantes raciones de humor negro, violencia y macarrismo, sin olvidarme de resaltar la constante creatividad tras la mayoría de historias, pues revisten diferentes puntos de interés aunque no lo parezca a simple vista. Así pues, los guiones me han resultado sumamente disfrutables.
En cuanto al acabado gráfico del tomo, se mantiene ese nutrido grupo de ilustradores que suelen desfilar por esta colección. Siguen siendo mis favoritos Bolland (aunque cada vez aparece en menos episodios, y soy consciente de que por su estilo tan refinado tardaba en hacer los encargos) y Smith (que nada tiene que envidiar a Bolland), pero con McMahon, sin ser santo de mi devoción, ha llegado a un punto en el que le he cogido el tranquillo tras leer tantas historias dibujadas por él. También ha sido placentero disfrutar de la entrada en este mundo de Dillon, artista que tantos buenos momentos me ha hecho pasar leyendo su trabajo en otras colecciones, y que realiza muy buena aportación a Dredd. Es lógico que vuelva a notarse cierta diferencia entre el trazo de las distintas personas que trabajaron en estos progs, pero en líneas generales el apartado gráfico cumple bastante bien, y tiene lo bueno de que, ante cierta variedad, cada estilo puede gustarle a diferentes personas.
¿Merece la pena el cómic? Sabiendo de mi afición al personaje, y mi deseo de que lo disfrute más gente, SERÍA UN CRIMEN NO DARLE UNA OPORTUNIDAD, habida cuenta de las virtudes que atesora un tomo de este tipo, que además no creo que os aburra precisamente. A diferencia de algún otro de los tomos de archivos completos que sí requiere algo más de bagaje lector con el Juez Dredd, no veo ninguna gran razón que os desanime a leerlo, tanto si la idea es querer empezar con el personaje o leer más de él.
Por lo demás, este cuarto tomo de los archivos completos tiene el color azul oscuro de fondo, ya que cada tomo tiene uno diferente, y trae como extra una buena cantidad de portadas de los progs. Y esto es todo por mi parte, si queréis ver más reseñas mías podéis hacerlo aquí. También os dejo el enlace de mi guía de lectura del Juez Dredd, pensada para quienes deseen iniciarse con el personaje. ¡No quebrantéis la ley y sed buenos!
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