Tras la ducha, y después de estar un rato abrazados
en la cama, Natalia le propuso a Gabriel encargar algo de comida, y él aceptó
encantado, porque eso implicaba compartir algunas horas más con aquella
maravillosa mujer. Así que Natalia se levantó, se puso una bata, y se fue al
salón para llamar por teléfono y pedir la cena. Gabriel se quedó pensativo
en la cama.
No tenía miedo de acompañar a Natalia al evento
literario, ni siquiera si eso implicaba conocer al círculo más íntimo de ella,
pero sí le asustaban las posibles consecuencias para su relación. A fin de
cuentas, iba a ser una prueba para ambos, y él sabía que si la afrontaban
juntos, tenían todas las de ganar, pero ello requería una gran fortaleza
individual, y una conexión total de las dos partes. En unos días iban a salir
de dudas. Hasta entonces, había que disfrutar cada vivencia. Se levantó de la
cama, se dirigió al salón, y mientras ella hablaba por teléfono, él empezó a
coger su ropa, desperdigada por el suelo.
Para cuando Natalia colgó el teléfono, a Gabriel
sólo le faltaba por ponerse la camisa. Se había abrochado el primer botón
cuando ella le relevó en la tarea, apartando las manos de él. Por unos segundos
se miraron con la complicidad propia de los amantes ya consolidados. Al tiempo
que ella iba abrochando la camisa, ambos hablaban:
- Ya he pedido la cena, tardarán una hora como mucho.
- De acuerdo, ¿qué pediste?- pregunto él.
- Es una sorpresa cariño.
- Veo que quieres darle un toque enigmático, me parece
bien. ¿Qué te parece si mientras tú te vistes, yo preparo la mesa y pongo algo
de música?- Gabriel abrió la bata que llevaba Natalia, y se deleitó observando
su cuerpo, tan deseable como la manzana del árbol prohibido.
- Me parece perfecto- ya casi había terminado de
abrocharle la camisa a Gabriel-, veo que disfrutas con las vistas interiores de
la bata.
- Son preciosas, estás estupenda- y le dedicó una
dulce sonrisa-. Sabes, aún me cuesta asimilar que tenga el privilegio de
disfrutar de este cuerpo a menudo- en ese punto, le cerró la bata con
suavidad-. Agradezco cada día que entre nosotros fluyera la magia del modo en
que lo hizo.
- Yo también lo agradezco, no sabes cuánto. Has hecho
méritos para disfrutar de cada cosa que pueda ofrecerte Gabriel- le abrochó el último
botón y le dio un largo beso-. Voy a vestirme, enseguida vuelvo.
Natalia recogió su ropa del suelo, y se fue a la
habitación. Entonces Gabriel se dirigió hacia donde estaba el equipo de música,
y activó la función de la radio. A los pocos segundos, las notas iniciales del
“Rocket men” de Elton John resonaban en la habitación. La canción venía a
resumir el modo en que se sentía Gabriel en aquel instante, como un enorme
hombre cohete capaz de llegar a la luna con Natalia a su lado. Aunque era una
canción con algunos años de antigüedad, conservaba intacta esa chispa que la
había convertido en un gran éxito. Y además, había permitido que Gabriel se
imaginara volando por encima de la atmósfera terrestre, rumbo a la luna,
sintiéndose un poco como Clark Kent cuando sobrevolaba algún lugar con Lois
Lane agarrada a él.
Con una sonrisa en su rostro, Gabriel empezó a poner
la mesa. Tardó poco, ya que una vez que acabó, le había dado tiempo a buscar y
encender unas velas antes de que la canción terminara. La siguiente, quizás con
un efecto premonitorio de cara a la cita del fin de semana, fue “Ain’t no
mountain high enough”, cantada a dueto por Marvin Gaye y Tammi Terrell. Le
siguió “Give a little bit” de Supertramp, y como si se tratase de un guiño del
destino, Natalia regresó al salón, y Gabriel, impulsado por la energía de aquella
alegre canción, la cogió de la cintura, le mordisqueó juguetonamente el cuello,
y le dio un beso cargado de pasión.
Hasta que vino el repartidor con la cena, los dos
estuvieron acurrucados en el sofá, a la luz de las velas, mientras la música
los tenía hechizados. El sonido del timbre les sacó de aquel embrujo, y Natalia
se preparó para atender al repartidor. Al final ella se había decantado por uno
de los mejores alimentos de Italia: un par de pizzas. Ambos comieron sin dejar
de lanzarse miradas cómplices, sabiendo que el postre a aquella cena no lo
había traído el repartidor, ni estaba en la cocina: eran ellos. Así fue como,
tras terminar la cena y tomarse una copa de vino, terminaron aquel día
marchándose a la cama de Natalia para disfrutar del postre.
Al día siguiente, Gabriel se despertó temprano, y
logró salir de la habitación sin despertar a Natalia. Le apetecía prepararle el
desayuno y llevárselo a la cama. A diferencia de otros días, Gabriel se sentía
raro aquella mañana. Intentaba averiguar sin éxito el por qué, mientras ponía
en marcha la cafetera, y metía rebanadas de pan en la tostadora. Fue al otro
baño que había en el piso, y se lavó bien la cara. Aquella sensación seguía persistiendo,
y Gabriel no lograba dar aún con la tecla adecuada para averiguarla. Una vez
que secó la cara, volvió a la cocina, donde pululaba el maravilloso aroma del
café recién hecho. Encontró una bandeja en uno de los muebles, preparó dos
tazas de café, un par de tostadas con mermelada para cada uno, y regresó a la
habitación portando la bandeja. Al divisar el cuerpo de Natalia bajo las
sábanas, supo por qué se sentía raro aquel día: estaba totalmente enamorado de
ella.
Tuvo que apretar con fuerza la bandeja, porque casi
se le escurre de las manos al saber con total certeza lo que le pasaba. La veía
allí, tumbada en la cama, con su dulce y precioso rostro asomando sobre las
sábanas, y no podía evitar sentir que la quería, por disparatado que fuera a
pesar del poco tiempo que llevaban viéndose. Aunque el día anterior había
sospechado algo, y de ahí la condición que le puso para acompañarla al evento
literario, no había sido hasta esta mañana cuando había asumido totalmente su
situación. La quería. Eso le asustaba, porque sus anteriores relaciones más
serias, habían sido con chicas de su edad, y eso era algo más natural de
sobrellevar. Y no es que la edad de Natalia le importara, para nada, pero una
relación con ella suponía jugar a otro nivel, y le asustaba no dar la talla.
Estaba enamorado, ansioso por jugar en aquel nivel superior, pero temía no
estar a la altura con el paso del tiempo. Por irónico que pareciera, no se
había planteado si ella también estaba enamorada, porque algo en su interior le
decía que así era. No le habría propuesto lo del fin de semana si no fuera así,
o al menos así lo pensaba él. Eso no acreditaba nada definitivo, pero era un
indicio más que considerable.
Una vez que sus pensamientos volvieron al motivo por
el que estaba allí de pie, se acercó a la cama y colocó sobre ella la bandeja.
Se inclinó para darle un beso en la frente a Natalia, y ésta empezó a abrir
lentamente los ojos, dejándose endulzar el despertar por el olor del café y el
beso de Gabriel. Iba a decir algo cuando él puso un dedo en sus labios, siendo el
primero en hablar:
- Buenos días encanto, no sabes lo resplandeciente que
estás recién despierta.
- Eres un zalamero cariño, no sé yo si tendré muy buen
aspecto ahora mismo ja ja.
- Tienes el aspecto perfecto para empezar el día,
espero que este desayuno sea de tu agrado.
- Es genial, me encantan las tostadas con mermelada-
cogió una y le dio un bocado-. ¿No me acompañas?
- Claro- y se sentó en el borde de la cama, cogiendo
una de las tazas y dando un buen sorbo-. Sabes Natalia…esta mañana me he dado
cuenta de algo.
- ¿De qué?- terminó una de sus tostadas y se quedó
expectante por la respuesta.
- De que te quiero.
- Eso es…maravilloso Gabriel- Natalia sentía una gran
alegría en su interior, fruto de la reciprocidad de ese sentimiento por él-. Yo
también te quiero. Llevamos poco tiempo viéndonos, pero algo me decía que tú y
yo…bueno, que tarde o temprano íbamos a compartir el mismo sentimiento.
- Tienes razón, esto es maravilloso. Me asusta pero es
maravilloso, espero estar a la altura de lo que te mereces.
- Solamente debes ser tú mismo, es lo único que
quiero. Que sigas siendo la persona que me ha maravillado hasta ahora. No me
importa que tengas mil defectos que aún he de conocer, sé tú mismo.
- Lo seguiré siendo, te lo prometo- y le dio un beso
en los labios, notando el sabor de la mermelada-. Me hace muy feliz saber que me quieres.
- Apúntame en esa misma lista si eres tan amable.
- Así se hará, serás usuaria privilegiada. Anda,
termina de desayunar, que es la comida más importante del día.
- Entonces nada como disfrutarla junto a la persona
más importante del día.
- Como dijiste antes…eres una zalamera cariño.
Y ambos se echaron a reír. Una vez que terminaron de
desayunar, se vistieron y salieron del piso. Ya en la calle, y después de
quedar nuevamente para tapear, se despidieron. Iba quedando menos para el fin
de semana, y el evento literario pondría a prueba el amor que ambos empezaban a
sentir el uno por el otro. Ya en la universidad, Gabriel se dio cuenta de que
no tenía nada lo bastante elegante para ponerse el fin de semana, y se preguntó
si tendría una tarde a lo “pretty woman” junto a Natalia, con los roles cambiados.
Continuará...
Me tiene intrigada cómo se va a resolver esta historia de amor. Algo me dice que Gabriel va a salir perdiendo.
ResponderEliminarEso está muy bien, que conserves intacta esa intriga jeje. Bueno, piensa que si él sale perdiendo, ella también lo hará, más les vale que no sea así. ¡Un saludo!
EliminarPorfi, porfi, porfi! No permitas que nada malo les pase... Les he cogido mucho cariño ;)
ResponderEliminarDebe de ser una de mis historias donde más cosas buenas les suceden a los protagonistas. ¿Cambiará eso en algún momento? Te dejo con la intriga jaja, me alegra que hayas empatizado con los dos :) ¡Un beso!
EliminarUna Historia de amor donde la diferencia de edad puede importar,no ahora sino de aquí en adelante. Deseosa de saber mas de este romance.... Un abrazo
ResponderEliminarP.D. Muchas gracias por compartir mis relatos que tengo tres para sacarlos a la vista. Sin vosotr@s ahora que estoy vetada por Google y no se porqué, seria muy difícil ser visible. Gracias
Con el permiso de José Carlos "meto baza" para decirte que hace unos días te dejé un mensaje privado explicándote por qué te habían vetado en Google. Creo que no lo has leído, y seguro que te interesa para que no te vuelva a suceder.
EliminarUn abrazo y ánimo!!
Bueno, a veces la diferencia pasa factura Mª del Carmen, aunque también es cierto que edades similares tampoco aseguran un éxito continuo. Otro abrazo.
EliminarSiendo una cosa puntual has hecho bien en decirle por aquí eso Julia. ¡Otro abrazo!
EliminarMmm ahora descubrieron al fin el sentimiento y ya no es una relación puramente física, aunque nunca lo fue totalmente. Creo que así como se siente la felicidad porque es recíproco también los sentimientos, muchas veces, complican las cosas. La diferencia ya de edad, por ahora, no es problema por la mis emoción del amor recién descubierto pero veamos en adelante lo que le depara a este par que nos endulza los días a este momento. Muy tierno capítulo JC! Saluditos desde la 707.
ResponderEliminarAsí es Mendiel, ya han abierto el tarro de las esencias, y has apuntado muy bien, realmente nunca llegó a ser algo puramente físico. Quién sabe qué les deparará esa diferencia ahora o en el futuro, hay tantas cosas en las personas que puedan acabar con una relación, que la edad es sólo una de ellas. Gracias por tus palabras. ¡Otro saludo!
EliminarCreo que todos hemos empezado a imaginar un final para esta pareja, espero que sea un fin que a todos nos deje con una sonrisa, y hasta el momento JC no has fallado com ello amigo.
ResponderEliminarUn abrazo compañero
Bueno, no sé decirte si el final dejará con una sonrisa, ya sabes que a veces rematar una historia, sobretodo una de este tipo, es complicado a la hora de dejar un buen sabor de boca, pero espero que guste :) ¡Otro abrazo Anto!
Eliminarojala y se queden juntos me gusta esa pareja, saludos amigo
ResponderEliminarmuy buen capitulo besos
Gracias Letty, hacen buena pareja a pesar de las diferencias que puedan separarles en algunos aspectos. ¡Besos y gracias por pasarte a comentar!
EliminarTodo es tan ñoño y perfecto... me ha gustado, tiene toques de pasión y, a la vez, de un cariño singular.
ResponderEliminarUn saludo.
Hola y bienvenida a esta historia Laura. Lo cierto es que no se puede quejar ninguno de los dos, están viviendo cosas bonitas a lo largo de estos capítulos. ¡Un saludo!
EliminarComo siempre, una narración impecable y genial ese momento musical, eh. Es una buena idea indicarnos las canciones que están escuchando los amantes, je, je, así nos ponemos en situación. Entre eso, las tostadas con mermelada y el almibarado diálogo, ya no necesito echarle azúcar al café que me voy a tomar ahora mismo, ja, ja. Oye, una duda (no sé si te hago una pregunta que ya has contestado, pero bueno): ¿Tienes ya diseñada la estructura total del relato, con final incluido, o la vas desarrollando sobre la marcha?
ResponderEliminarHasta la próxima entrega
Saludos
Gracias por tus palabras Isidoro, siempre es un placer leerte. La verdad es que tenía pendiente citar algunas canciones en este relato, y aquí vinieron en tropel jaja. Qué interesante el haberte endulzado el café desde las letras jeje.
EliminarSobre tu pregunta, tengo un final pensado a falta de algunos matices, y también me impuse hace tiempo un máximo de capítulos, ya va quedando poco. Por lo demás, al ir escribiendo esto sobre la marcha, sí que tiene más partes de las que imaginé en un principio.
Hasta la próxima, un saludo compañero.
Puesss yo pongo la nota discrepante a un comentario que he leído (no permitas que nada malo les pase)... ¿para cuando un conflicto serio en la pareja? jejeje sí ya se que soy malo pero la vida es así, y si sobreviven seguro que salen reforzados y sino... son jóvenes ;) interesante esta historia que empezó como un encuentro casual y ya va por la octava entrega. A mi también me surge la duda de Isidoro ¿hay planificado un final para la historia?. Esperamos ansiosos el siguiente capítulo, a ver como funciona la relación una vez presentados en sociedad. Un saludo.
ResponderEliminarHaces bien en poner la nota discrepante jaja, siempre se agradece leer preguntas así. Bueno, lo cierto es que alguna que otra cosilla les enfrentará, a fin de cuentas nada es perfecto, pero como bien mencionas, si sobreviven saldrán reforzados.
EliminarLo cierto es que no me imaginaba llegar a estas alturas cuando escribí el primer capítulo hace meses. Como le he comentado, sí, tengo planificado un final a falta de algunos cabos que atar, y también tengo un número de capítulos límite en mente, no queda mucho, menos de lo que llevamos.
A ver qué les depara ese momento. ¡Otro saludo!
Un capítulo fantástico, José Carlos, con esa presentación muy bien planteada de dudas, momentos iniciales, ilusiones.
ResponderEliminarAprovecho para comunicarte que te he nominado para el Very Inspiring Blog Award.
Abrazo!!!!
Muchas gracias Mª Jesús, siempre es un placer leer tan elogiosos comentarios. Ha habido lugar a todo, dudas, confirmaciones, música...
EliminarGracias por la nominación compañera, otro abrazo :)
Ainssss efectivamente mi comentario no ha salido. Le contesté a Carmen antes de enviarlo y lo perdí, con la rabia que da eso. En fin...
ResponderEliminarDecía que descubrir sentimientos tan fuertes por otra persona, de repente, puede llegar a impresionar y dar un poquito de miedo. Lo bonito de este caso es que son sentimientos correspondidos :))
Hasta ahora todo va como la seda, ya veremos si en algún momento hay algún contratiempo (en mi Malena todo sale mal y en tu Encuentro casual todo sale bien jajaja).
Buena entrega, nos dejas con ganas de más!!
Un abrazo!!
Vaya vaya, al final haces doblete jaja. Estoy de acuerdo, descubrir esos sentimientos puede provocar algo de vértigo, sobretodo si se duda de la reciprocidad, aunque he querido ser bueno :P
EliminarEs cierto, a tu Malena se la ha tragado un tornado y a estos dos les brilla siempre el sol jaja. ¡Otro abrazo!
Me sigue dando miedo tanta perfección en este idílico romance de este par.
ResponderEliminarEspero equivocarme, pero si lo hago va a resultar un relato lineal y sin fisuras que dejen entrever algún secreto, alguna arruga entre las sábanas.
¿qué nos tienes preparado señor escritor?
Un abrazo.
Cierto, nada es perfecto ni eterno, y estos dos llevan exceso de perfección acumulada jeje. Cuando se han dado estos pasos a lo largo de los capítulos, entra uno en terreno pantanoso, sobretodo con tanta expectación y seguimiento de la historia. Espero que lo que acontezca sea bien recibido.
Eliminar¡Otro abrazo Francisco!
Me ha encantado el capítulo, JC, me ha gustado en especial la parte en que entrelazas las canciones con los sentimientos del protagonista, hasta me ha parecido oírlas.
ResponderEliminarMe gusta cómo se va desarrollando la historia, pero creo que algún giro inesperado nos va a sorprender, ¿verdad?
Me encanta como estás consolidando la historia, felicidades.
Un beso enorme
Gracias por tus palabras Chari, me resulta muy agradable leer que te haya gustado el capítulo y ese toque musical :) Bueno, no te puedo decir sí o no sobre los giros o la falta de ellos jeje.
EliminarEs un placer tenerte de seguidora activa de la historia, otro beso enorme :)
Miedo me da lo bien que les va. Algo malo seguro que les pasa.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho porque has reflejado el día a día de un comienzo de relación.
Genial.
Un abrazo.
Bueno bueno, creo que he debido pasarme de bondadoso con la narración si tan perfecto e idílico parece jaja. Me alegra haber logrado aportar ese toque cotidiano y real al comienzo de la relación :) Gracias por pasarte y comentar. ¡Otro abrazo María!
EliminarLeído en un suspiro, por su fluida narrativa y "zalameroso" guión. Una vez más, logras sumergirme en el sentimiento y en la emoción, en el alma del relato. Evoluciona la relación, madura y llena de buen gusto, las escenas se experimentan cálidas y envolventes. Es un enorme placer, te lo digo con total sinceridad, ver cómo, capítulo tras capítulo, no disminuye la calidad de la escritura, las decisiones argumentales y la profundidad de los personajes. Es una deliciosa lectura, desde el aroma del café hasta los besos con mermelada... Pero, por un instante, he presentido una nota oscura entre la luz de estos amantes, ya enamorados.
ResponderEliminar¡Abrazo, José Carlos!
Gracias Edgar, me ha hecho reír la "zalamera" mención jaja. Siempre es gratificante lograr que la persona que lea, se logre sentir partícipe de la situación, que en este caso es como has mencionado, de evolución y madurez.
EliminarEs un reto intentar que cada nuevo capítulo no suponga un desgaste y que pueda aportar cosas nuevas y avances importantes pero mostrándose comedidos. Quien sabe si habrá alguna nota oscura o toda una sinfonía de luz, en el próximo capítulo habrá indicios para un lado u otro jeje. ¡Otro abrazo Edgar!
Me encanta esta historia :) Toda pasión y todo amor desde el primer encuentro, aunque hoy verbalicen el sentimiento. Prefiero no adelantar acontecimientos por eso me muero de ganas de leer más jejeje. Un abrazo!!
ResponderEliminarHola Elena, es un placer leer que te encante esta historia, en la que como bien has resumido, desde el primer encuentro ya tenía elementos pasionales que en este capítulo han progresado a algo más revelador. Me alegra dejarte con ganas de leer más :) ¡Otro abrazo!
EliminarMmmm.. que me encanta eso ya lo sabes José Carlos pero la perfección no existe y en algún momento debe salir a la luz algún problemilla y creo sino me equivoco que se presentará el fin de semana con el nombre de evento literario.
ResponderEliminarNos dejas empalagosos y llenos de sentimientos bonitos, :)
Un abrazo, ;)
¡Hola! Saber que te encanta es de esas cosas que compensa con creces invertir tiempo en esta historia. Tienes razón, la perfección no existe, y la verdad es que no vas muy desencaminada jeje.
Eliminar¡Otro abrazo!
Por qué será que ver que va todo tan bien y parece tan perfecto que da un poco de miedo. ¿La perfección existe? ¿qué se esconde detrás de fachadas perfectas?
ResponderEliminarMe gustará ver cómo lo continuas.
Saludos
Hola Conxita, cuesta pensar que exista esa perfección que nos ofrezca un camino libre de obstáculos, así que pronto se desvelará si el camino para estas dos personas ofrece un nuevo trecho recto o una pequeña cuesta :) Pronto subiré el siguiente capítulo, gracias por pasarte y comentar. ¡Un abrazo!
EliminarBueno, sigues manteniendonos en suspense, expectantes por la llegada del ''gran día''. Me gusta que hayas creado un ''objetivo'', enlace común, en la trama, que se comparta en varios capítulos, para que no se traten de simple capítulos independientes con la única relación de la pareja. Esto crea suspense, como he dicho, y te anima a seguir leyendo. Como siempre, unos diálogos excelentes. Y ahora, a esperar el ''gran día''...
ResponderEliminarSaludos, José.
Saludos Ricardo, aunque se demora en el tiempo, el próximo capítulo ya se mete de lleno en ese día. Pienso que si no hubiera introducido ese enlace común que mencionas, la lectura podría haber sido demasiado monótona por corta que fuera, así que me alegra ver que le añade un interés adicional a la trama. Gracias por destacar los diálogos. ¡Un saludo Compañero!
EliminarVoy rápido a devorar el siguiente... ji,ji.
ResponderEliminarEspero que te guste :) ¡Un saludo!
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