26 de septiembre de 2021

Reseña de Lucky Luke Classics 3: La balada de los Dalton. Lo que hay que sufrir para cobrar una herencia

¡Un saludo desde las polvorientas tierras del salvaje oeste! Ésta no es mi primera lectura de las aventuras de Lucky Luke, pero sí me estreno leyendo la colección de aventuras clásicas del personaje, realizadas por los creadores del mismo. Esto es así porque mis anteriores reseñas en este blog estuvieron dedicadas a "Un cowboy entre algodones" de la línea según Morris, y también hablé de "El hombre que mató a Lucky Luke", obra que está fuera del canon del personaje pero que es de mucha calidad. Pues dicho lo anterior, toca hablaros de lo que ha supuesto para mí leer este "Lucky Luke Classics 3: La balada de los Dalton" de Ediciones Kraken. 


Esta obra objeto de reseña no es ni de lejos la tercera aventura en orden cronológico del personaje, ya que, para cuando fue publicada por Dargaud y Lucky Comics, ya existía esta figura desde hacía varias décadas, y desde sus inicios se publicaron sus historias. Es por eso que no está de más recordaros los orígenes de este popular vaquero de las viñetas. Lucky Luke, el hombre que dispara más rápido que su sombra, fue una creación de Maurice de Bevere (1923-2001), cuyo alias artístico era Morris. Este vaquero vio la luz por primera vez en 1946, concretamente en el "Almanach 47 de Spirou", y nació como un homenaje y a la vez una parodia de las aventuras del lejano oeste. A la vista de que a día de hoy se han hecho adaptaciones al cine, series de dibujos, videojuegos y demás, queda claro el enorme éxito y huella que ha dejado en el mundo esta creación de Morris. 


En lo que a Ediciones Kraken se refiere, que es la editorial que desde hace unos cuantos años publica las aventuras del personaje en España, la primera edición de esta obra apareció en 2013, y es ahora en 2021 cuando ha tenido lugar la publicación de una segunda edición de la misma. Que no os desanime empezar a leer la colección a través de esta tercera entrega, pues no es necesario ser un lector/a habitual de Lucky Luke para disfrutar de sus aventuras, ya que son de carácter auto-conclusivo. En esta ocasión el tomo contiene tres historias, la principal que da nombre al cómic, y otras tres más breves pero no por ello menos interesantes, cuyas tramas abordaré más adelante. 

¿Qué autores han participado en este tomo? Como guionista estuvo al frente de esta obra René Goscinny (1926-1977), figura mítica del cómic europeo (co-creador de "Astérix el Galo" o "Iznogud"), y uno de los grandes colaboradores que tuvo el ilustrador Morris (1923-2001), vinculado casi de forma completa a trabajar con el personaje de Lucky Luke (aunque también dibujó por ejemplo las aventuras en solitario de "Rantanplan"). De la traducción al castellano se ocupa Carlos López.

¿Qué historias nos encontraremos aquí? Si bien hay cuatro en el tomo, la sinopsis de la más extensa es la siguiente: 

"Para vengar a su tío y heredar su fortuna, los Dalton tendrán que matar a un chino, al director de una cárcel, a un indio, a un médico, a un buscador de oro, a un jugador profesional, a un conductor de locomotora y a un enterrador, todos ellos enemigos de su tío. 

¡Pero Lucky Luke está al tanto!"

Imaginad la gran ironía que tiene lugar cuando los hermanos Dalton, que están en la cárcel gracias al buen hacer de Lucky Luke como defensor de la ley, se enteran de que ha fallecido uno de sus tíos, y que para heredar su cuantiosa herencia, deben asesinar a los miembros del jurado que le condenaron a muerte. Pero la única condición del testamento, es que haya un testigo que presencie los asesinatos de dichas personas... ¡y tiene que ser Lucky Luke!

Es así como arranca esta historia, en la que los cuatro hermanos Dalton deberán escapar de la cárcel, y además establecer una especie de alianza con Lucky Luke (que , para que éste presencie cómo liquidan uno a uno a todos los miembros del jurado que sentenció a muerte a Henry Dalton. En caso de que no acaben con todas estas personas, el dinero de la herencia iría a parar a causas benéficas, y eso es algo que los Dalton no están dispuestos a permitir. ¿Les ayudará Lucky Luke, un recto defensor de la ley, a cumplir con su objetivo de matar a esas personas?


Esto es todo cuanto os contaré de la primera historia. De las otras tres del tomo, dos se centran en Jolly Jumper, el carismático caballo de Lucky Luke. Aunque generalmente es un animal alegre y lleno de vitalidad, en la primera narración atravesará un raro período de melancolía, el cual preocupará terriblemente a Lucky Luke, que intentará averiguar qué le sucede a su fiel compañero de aventuras. En la siguiente ocasión, veremos al vaquero intentar descubrir quién robó su caballo y dónde lo tiene escondido. Y para cerrar este álbum, habrá una historia en la que nuestro solitario vaquero deberá formar a toda una agrupación de nuevos agentes de la ley, los cuales inicialmente no tiene muchas aptitudes para ser licenciados como sheriffs. ¿Logrará el bueno de Lucky Luke convertir a un grupo de torpes hombres en buenos defensores de la ley?

¿Qué valoración merece el trabajo de los autores? Como haría un vaquero en ciertas ocasiones, no me queda otra que quitarme el sombrero en señal de respeto por el trabajo de Goscinny y Morris. Empezando por el guionista, me he reído bastante con la primera de las historias del tomo, la que da nombre al mismo, y donde los Dalton me han sacado muchas sonrisas a lo largo de la historia. Es posible que, exceptuando a su líder Joe, sean la familia de villanos más tonta del mundo de las viñetas, pero uno les coge cariño por su capacidad para provocar risas en una lectura. Goscinny narra con dinamismo y humor una buena aventura que he disfrutado bastante, como también he hecho con las otras narraciones más cortas, donde Morris ha realizado otro buen trabajo con su creación.

Y respecto al apartado gráfico, Morris tiene el trazo clásico del cómic franco-belga de la época, pero no por ello es un estilo vulgar, sino que demuestra el talento que poseía este autor, capaz de sacar sonrisas simplemente con las imágenes que dibujaba, sin necesitar el apoyo de los textos para que el lector pueda echarse a reír. 

Respecto del color, es también el clásico de la época, bien acompasado con el trazo del dibujante, y que no desentona, jugando un buen papel cuando en ciertas escenas cómicas la tonalidad debe ser más intensa o inusual al resto de la obra. 

¿Merece la pena el cómic? Qué voy a deciros si el western me encanta en todas sus vertientes, desde la más seria a la más humorística. SÍ que merece la pena acompañar a Lucky Luke en sus peripecias por el lejano oeste, pues hay cabida para las risas y la evasión mediante la lectura de obras como ésta, que lejos de ser hijas de su época, envejecen bien y, al menos en mi caso particular, me ha dejado bastante satisfecho como lector. La mejor historia es la más extensa de todas, pero el resto son simpáticas y se dejan leer.

Si sois fans de Lucky Luke y no conocéis esta obra, os podrá gustar. Si sois gente nueva con el personaje, igualmente es una buena manera de comenzar con él ya que, guste más o menos, puede que os deje con ganas de leer mas del personaje.. Por ello os animo a darle una oportunidad. El tomo de Kraken es de tapa dura. Y esto es todo por mi parte, si queréis ver más reseñas mías, podéis hacerlo aquí. ¡Hasta la próxima y tened cuidado con los peligros del salvaje oeste!

18 de septiembre de 2021

La amante de los slasher

Aunque yo la vi por primera vez en 1980, "La noche de Halloween" de John Carpenter cambió mi vida para siempre. Lamentaba no haber nacido en los Estados Unidos, o al menos no haber estado allí para verla en 1978, cuando fue estrenada en cines. ¿Qué sensaciones me habría provocado esa película viéndola en una pantalla grande y rodeado de gente? ¿La banda sonora, hecha por el propio director con un sintetizador, me habría causado la misma tensión que a quienes la oyeran con la mejor calidad de sonido de la época en una sala de cine?

En cierto sentido, eso no habría cambiado el curso de las cosas. Al menos eso creo. Porque desde 1980, mi amor por el subgénero cinematográfico "slasher" comenzó de una forma tan brutal que a día de hoy, en pleno 2021, sigo sintiendo un cosquilleo en el estómago con cada nueva película que se estrena en cines o en plataformas de streaming. Mi idilio con el slasher llega al punto de que, sin importarme la calidad de la película o serie, veo cuantas producciones puedo. ¿Qué importa la trama mientras yo pueda ver cómo mueren los personajes? Mi auténtico interés se centra en eso, en ver la manera en la que el asesino se ocupa de sus víctimas, haya o no una verdadera motivación. Pienso que realmente, aunque un espectador o crítico de cine ponga a parir una película por su falta de trama o argumento, lo importante es meterse en el cerebro del asesino. ¿Necesita motivación para hacer lo que hace? ¿Y si, llana y simplemente, mata porque la caza le proporciona placer? En muchas de estas historias, hay escenas sexuales o con cierta carga erótica, por lo que veo natural que el villano también reciba su dosis de placer, aunque sea a base de sangre y gritos. 

Así que sí, Michael Myers cambió mi vida para siempre. Luego, en la medida en que pude, y valiéndome de los videoclubs (a fin de cuentas, durante bastantes décadas eran la manera de ver películas al margen de cines y la televisión), fui disfrutando de cuantos slashers pude. Entonces gente como "Leatherface", Jason Voorhees, Freddy Krueger, Chucky el "Muñeco Diabólico" fueron entrando en mi galería de amores platónicos junto a Myers. En la segunda mitad de la década de los 90, "Scream" apareció en mi vida como un soplo de aire fresco. Tuve otro flechazo con "Ghostface". Era de esos villanos que estéticamente no asustaba nada y parecía un tanto ridículo, pero... ¿y lo bien que se lo pasaba atemorizando a la gente? ¡Era un tipo que disfrutaba de verdad de lo que hacía, aunque le faltara más de un tornillo! Tampoco me olvido del pescador con el garfio de "Sé lo que hicisteis el último verano". Su aspecto asustaba más que el anterior psicópata, así que también se ganó un hueco en mi corazón.

Estaréis pensando a estas alturas... ¿Qué majaderías me está contando esta mujer y a santo de qué? La razón es sencilla. En el mundo de los slasher, hay asesinos que quieren que los atrapen y otros que no. Por eso algunos van dejando pistas, de forma consciente o inconsciente, en sus víctimas, para que alguien lo suficientemente astuto llegue a su nivel y los atrape, o al menos descubra su identidad. Aunque también hay otros villanos que hacen lo que hacen porque les place, sin tener un plan de acción, simplemente se trazan acabar con alguien y por el camino se cepillan a quien se encuentran. La mayoría de esos seres suelen ser inmortales, o al menos eso parece, porque, acaben de la manera en la que acaben en sus enfrentamientos finales con los protagonistas, siempre vuelven. Siempre. 

De todas formas, yo no viviré para siempre. Tampoco hago lo que hago por puro y simple placer. Ni quiero que me atrape nadie o se descubra mi identidad. Es por eso que escribo mis pensamientos y otras cuestiones en este diario personal. En otros apartados del diario constan mis sucesos vitales más importantes, como la cronología de mi obra culmen para inmortalizar mi amor por el slasher y llevarlo a cotas que nadie pueda lograr alcanzar jamás, al menos mientras yo viva. Es así como, si algún día alguien encuentra este diario, podrá averiguar que hace un año asesiné en Cádiz a un banquero, vestida de payaso y llevando una máscara de Halloween. En aquella escena del crimen dejé un cuchillo de cocina clavado en el pecho de aquel desgraciado, y junto a él, en un dvd sin desprecintar, una copia de "La noche de Halloween". Claro que no tenía huellas digitales para que me reconocieran, y, dado que usaba una peluca con el disfraz, tampoco hallarían fibras de mi propio cabello ni ningún otro rastro de mi adn.

Hace seis meses, maté en Madrid a una camarera de un bar de copas porque fue grosera conmigo unos días antes. Para ella fui disfrazada con un mono grasiento como el de Jason Voorhess, y una máscara de hockey. Y mi souvenir, además del correspondiente dvd, fue dejar un machete clavado cerca de su cadáver. Tampoco dejé ningún tipo de rastro para que pudieran seguirme.

Hará unos tres meses, caracterizada como Freddy Krueger, acabé en Valencia con la mísera existencia de un policía local que quiso chulearme con una multa de tráfico. Fue un enorme placer dejar clavado en su cabeza un guante con cuchillas como el que usaba el amigo Freddy. Si él actuaba en sueños en sus películas, yo me ocupé de hacerlo en el mundo de los despiertos. No faltó en la escena del crimen mi habitual dvd.

Y bueno, el mes anterior, y ya instalada en Santander, tuve que asesinar a una taxista que quiso sacarme un dinero extra timándome con el precio de la carrera. En aquella ocasión cedí al precio abusivo, y fingí estar tan encantada que le pedí su teléfono para llamarla cuando necesitara otro taxi. Vestida con un peto vaquero y una peluca roja, la llamé una noche y vino a recogerme. Le di una dirección en las afueras de la ciudad, y, cuando detuvo el vehículo ante un edificio abandonado, saqué del bolso unas tijeras de podar y la decapité. 

Para cuando encontraron a la víctima, y dado que siempre dejaba mis pistas en dvd, en toda la prensa comenzó a correr la noticia de que en distintas partes de España habían encontrado personas fallecidas con cierta relación con el cine slasher. La conexión era obvia, no había que ser una lumbrera para saber que se trataba de la misma persona. Concretamente de mí. No pretendía que me descubrieran, de ahí que me moviera por muchas ciudades, pero me era inevitable compartir mi pasión por el slasher con toda persona que leyera noticias sobre los crímenes. Además, la mayoría de grandes asesinos seriales del cine era hombres. ¿Llegaría alguien a descubrir que la responsable de estas muertes en España era una mujer con 67 años ya jubilada? 

Estaba disfrutando de mi jubilación como había vivido mi vida, amando el slasher, con la diferencia de que mi manera de disfrutar el fin de mi ciclo vital laboral, estaba lleno de sangre, muerte y placer. Mi próximo destino iba a ser Granada, la ciudad de la Alhambra, Sierra Nevada, y el embrujo nazarí. Dice un popular dicho que "Todo es posible en Granada", así que, pensando en qué aspecto tendría para acabar con mi próxima víctima, sentía una inmensa satisfacción interior al pensar que sí, que iba a hacer válido aquel dicho local.

Y ésta soy yo querido diario, una mujer que ha llevado su pasión al máximo, viviendo desde ambas perspectivas un amor platónico que se inició allá por 1980. Durante casi toda mi vida observaba cómo alguien mataba a gente a través de una pantalla. Y desde hace poco, soy yo quien ha tomado un papel más activo manchándome las manos de sangre. Dudo que algún día la policía o alguien lo suficientemente listo me atrape y además descubra este diario. Pero si eso sucede, que conste aquí, en esta anotación, que me gustaría ser apodada "La amante de los slasher". 

9 de septiembre de 2021

Reseña de Grandes de lo Macabro. Un repaso por la trayectoria de Joan Boix en las historias de terror y suspense

¡Saludos desde el interior de un caserón ruinoso! Es noche de tormenta, no paro de escuchar ruidos aterradores por todas partes, y la única vela que me proporciona luz mientras escribo esta reseña, se va consumiendo poco a poco, dejándome progresivamente a merced de unas sombras que se acercan más a mí. Por eso, antes de que la negrura lo invada todo, os contaré qué me ha parecido "Grandes de lo Macabro" de Aleta Ediciones. 


Desde que Aleta Ediciones volvió al ruedo de las publicaciones con la intervención del grupo Sargantana, no han parado de dar, si me permitís el término, "aletazos" con algunas de sus publicaciones en este 2021. Y lo digo en el mejor de los sentidos, porque la editorial está recuperando obras que, o bien estaban inéditas en nuestro país hasta que ellos las sacaron (como "Winterworld" o "Danger Unlimited"), o han sido reeditadas con añadidos de lo más interesantes, como sucede con la obra objeto de reseña. Y os seré sincero, en una época donde hay tanta competencia editorial en España, con una publicación mensual de cómics que quizás supera la demanda de lectores de este formato, se agradece mucho que gente como los de Aleta tengan parte de su nicho de novedades en este tipo de contenidos. 


No está de más decir que allá por 2009, a través de Ediciones B, fue publicada una recopilación con estos relatos de Joan Boix. Pero de eso hace bastante tiempo, y ya iba tocando tener una nueva oportunidad de que, quienes no leíamos cómics por esa época, pudiéramos conseguir esta obra con esta reedición, que tiene el aliciente de contar con una portada hecha en este 2021 por el propio Boix para la editorial. Eso en lo referente a la edición en sí. En cuanto al contenido... pienso que toda persona amante de las historias de Edgar Allan Poe, Gustavo Adolfo Bécquer, Arthur Conan Doyle o H.P. Lovecraft encontrará aquí una más que interesante propuesta narrativa donde los personajes viven situaciones de lo más horripilantes, ya sean psicológicas o físicas. Al mismo tiempo, mientras leía esta obra, me era inevitable recordar muchas películas hechas por la Hammer, donde con presupuestos bajos, te contaban historias de lo más absorbentes y casi siempre ambientadas en casas abandonadas, castillos ruinosos o parajes inhóspitos. Y es lo que vais a encontrar aquí, historias donde la sombra de la muerte y la desgracia se palpa en cada viñeta. 

¿Qué autores han participado en esta obra? Todas las historias, en formato blanco y negro, están escritas e ilustradas por Joan Boix (autor conocido por participar en muchas historias de "Hazañas Bélicas" o por su labor como artista completo en "Jonathan Strupy. El condenado del faro"), de quien no todas sus obras para el extranjero han sido publicadas en España, como por ejemplo su larga etapa con la serie "El Hombre Enmascarado". 

¿Qué historia nos encontraremos aquí? Al ser una antología de narraciones cortas, más que sinopsis os comparto la información de la editorial:

"Publicadas hace casi 50 años en revistas míticas como Dossier Negro o S.O.S., Aleta Ediciones recupera 20 historias de terror realizadas por el gran Joan Boix, algunas de ellas basadas en relatos magistrales de H.P. Lovecraft, Franz Kafka, Arthur Conan Doyle, Gustavo Adolfo Bécquer o Edgar Allan Poe.

Una nueva portada realizada por Joan Boix redondea esta edición definitiva del trabajo de uno de los mejores maestros del terror."

Como aviso para navegantes, no todas las historias de aquí son adaptaciones de las obras de otros autores, pues también hay unas cuantas que son de creación propia, lo que hace que esta lectura permita su abordaje desde dos perspectivas distintas: la del autor respecto a su visión de historias de creación ajena, y las que él mismo imagina. En cualquier caso, en ambos campos lo que se cuenta inquieta, y uno no se queda indiferente. Al menos así ha sido mi experiencia.

Como en estos casos es mejor no desvelar mucho de las tramas para que el factor sorpresa juegue en favor de las historias, únicamente mencionaré algunas cosas que podéis encontrar por el camino, siempre que os animéis a adentraros en esta obra claro. Desde profanadores de tumbas que montan su propia colección de lo macabro, a figuras de colección que piensan, pasando por experimentos con la hipnosis, doctores que deben atender una urgencia médica en plena noche, o encuentros con hombres ahorcados. Y hay más, mucho más, de hecho hay espacio hasta para el amor, pues otra de las historias está protagonizada por dos personas que no se conocen personalmente, pero llevan mucho tiempo escribiéndose cartas, aguardando su primer cara a cara. También podéis ser testigos de la transformación de alguien en... bueno bueno, que ya he mencionado demasiado, y no quiero ser el protagonista de ningún funesto destino por desvelar más de la cuenta.


Lo importante en una experiencia lectora como ésta, donde se trata de una recopilación de historias que se elaboraron en la década de los 70 y los 80, es disfrutar la experiencia. En ese sentido, puede hacerse de diversas maneras, como por ejemplo ver si estas narraciones son hijas de su época, con todos los defectos y virtudes de los cómics de aquellas décadas, o por el contrario han envejecido bien. Otra posibilidad es valorar si, en los casos de las adaptaciones de obras de otros autores, la visión de Boix os resulta lo bastante respetuosa con el material original, además de dejaros buen sabor de boca. Y claro, tampoco hay que dejar en el olvido la opción de leer todo esto en su relación causa-efecto; esto es, si os inquieta lo que habéis leído y no os deja precisamente indiferentes. En definitiva, en una publicación como ésta, de lo que se trata es de que encontréis los mejores argumentos para disfrutarla.

¿Qué valoración merece el trabajo del autor? En lo estrictamente narrativo, hay algunas historias donde, siendo honesto, no puedo juzgar si son buenas adaptaciones del material originario, porque no he leído a todos los autores adaptados, y voy a optar por no entrar en este terreno. Ahora bien, hablando de cada episodio en sí sin tener en cuenta ese aspecto, considero que Boix logra impregnar cada relato de oscuridad, desasosiego y angustia, y no es difícil sentirse inquieto viendo de qué manera le llegará el final al personaje protagonista, porque en muchas ocasiones se percibe claramente que nada de lo contado tendrá un final feliz. Pero al final, si uno lo piensa, algo en nosotros nos hace seguir viendo o leyendo historias donde sabemos que no habrá un final feliz, como si esperásemos la tragedia. ¿Qué nos hará seguir adelante? Quizás una especie de curiosidad morbosa, como cuando uno ve una película slasher sabiendo que va a palmarla hasta el apuntador. En ese sentido, si os gustan este tipo de historias trágicas, vais a pasarlo en grande con el cómic.

Por otra parte, en el apartado gráfico hay varias cosas a examinar. Podéis ver la evolución del autor de una década a otra, o bien la narrativa más experimental en las composiciones de página. Al margen de eso, el trazo es en ambos casos uno de esos que sin apenas esfuerzo, el lector reconoce como propio de las historietas de terror. Y esto, teniendo en cuenta que Boix ha ilustrado historias de todo tipo y género en su extensísima carrera, es bastante meritorio. Si una historia cala en una persona por la manera de ser escrita, también lo hace por cómo se cuenta gráficamente, siendo el culmen de esto tener un formato como éste donde no es necesario imaginar la escena que sucede, porque ya se está viendo en toda su viveza. Así que solo puedo valorar positivamente el dibujo de Boix.

¿Merece la pena el cómic? He de ser directo, pues la llama de la vela que me protege de las sombras va a extinguirse... así que SÍ. Paladead y disfrutad de estas historias macabras, donde el terror, la tragedia y la angustia están tan entrelazadas que no os dejarán indiferentes. Además, ésta es una oportunidad de disfrutar de un artista español que las nuevas generaciones posiblemente no conozcan, y merece tener más reconocimiento. 

Por último, y respecto de la edición, Aleta ha sacado la obra en formato de tapa dura, y incluye como extras esa portada hecha por el autor en este 2021, así como una bibliografía sobre él. Y esto es todo por mi parte, si queréis ver más reseñas mías podéis hacerlo aquí. Los sonidos a mi alrededor se intensifican y cada vez son más aterradores, la vela acaba de apagarse, y estoy a oscuras, así que... ¿hasta otra ocasión?

6 de septiembre de 2021

Reseña de Don Vega. El Zorro, el héroe del pueblo e impulsor de la esperanza

¡Saludos encapuchados! He de confesar que "El Zorro" es un personaje que me causó interés desde la primera vez que vi "La máscara del Zorro" (1998) dirigida por Martin Campbell, con Anthony Hopkins y Antonio Banderas como las dos encarnaciones del personaje en esa historia. Por eso no podía contener las ganas de leer "Don Vega" de Nuevo Nueve, una obra que aborda el nacimiento de esta leyenda. 


Publicada en 2020 por Dargaud, Nuevo Nueve la ha publicado ahora en septiembre de 2021. No obstante, y aunque el Zorro es un personaje muy popular a día de hoy, quizás no sepáis cuándo fue creado y por quién, razón por la que no está de más resolver ese posible interrogante si lo tenéis. El personaje fue una invención de Johnston McCulley (1883-1958) que apareció por primera vez en 1919, en "La maldición de Capistrano", una historia que originariamente se publicó de forma serializada en varias entregas de la revista "All-Story Weekly". La gran acogida que tuvo la obra provocó que el autor escribiera muchas más aventuras del Zorro con el paso de los años. Si uno hace balance general del legado e impacto de este héroe enmascarado y totalmente vestido de negro, se puede ver que se han hecho muchas adaptaciones de sus historias en formato cine o serie, al mismo tiempo que se han escrito novelas, e incluso realizado obras de teatro o juegos de ordenador o videoconsola. 


¿Y qué tiene de especial el Zorro? La respuesta variará mucho dependiendo de cada persona, pero creo que un denominador común es el hecho de que es, entre otras cosas, un héroe del pueblo, un luchador por la libertad, un símbolo contra la opresión. No es nada difícil percibir que las personas indefensas, las que están oprimidas por políticos o militares corruptos y ambiciosos, sienten como algo suyo al Zorro, porque libra las batallas que ellos solos no pueden librar hasta que vuelven a ser renovadas sus esperanzas de lucha. Eso es lo que hace que me guste tanto el personaje, el hecho de que sea un símbolo para su gente, alguien que, sin importar su identidad bajo la máscara, siempre está ahí, en diferentes épocas, porque mientras haya personas dispuestas a llevar esa máscara y sacrificar sus vidas a luchar con la injusticia, el Zorro vivirá y las personas que sufren nunca estarán solas y desamparadas. 

¿Qué autores han participado en esta obra? En este caso, y actuando como artista completo, está Pierre Alary (conocido por ilustrar obras como una adaptación de "Moby Dick" o "Simbad"), autor cuyo trabajo me ha hecho recordar en algunos aspectos la gran labor que, también como autor total, desempeñó Matthieu Bonhomme en "El hombre que mató a Lucky Luke". La traducción al castellano es de Dan Calvo Santa Olalla.

¿Qué historia nos encontraremos aquí? Comparto la sinopsis de la editorial: 

"Madrid, 1848. Don Vega, heredero de una acaudalada familia californiana, recibe una carta en la que anuncia la muerte de sus padres. 

A su regreso, Don Vega descubre que la finca familiar ahora está administrada por un ex-general, Gómez.

Él confía en Borrow, un bruto sádico, para hacerse con California comprando tierras a precios bajos para revenderlas luego a un precio más alto. 

Los peones tienen el valor de rebelarse. Con el rostro cubierto con un pasamontañas, dicen ser «el Zorro», un mito local popular. La gente los ve como héroes. 

Don Vega decide seguir su ejemplo: se pone un traje negro y está decidido a hacer pagar los expolios cometidos contra su familia."

Aunque habrá una página que nos pondrá al día de ciertos acontecimientos importantes a la hora de abordar la lectura del cómic en sí, todo arranca con esa carta que Don Vega, heredero de una familia de Californiana, y que se encuentra en ese entonces en una academia militar en España, recibirá de su tierra. En esa carta se enterará de muchas cosas y ninguna buena, como el hecho de que sus padres han muerto, y que todas las tierras y posesiones familiares han pasado a manos del ex-general Gómez. Gómez es uno de esos hombres codiciosos y sin ninguna moral o escrúpulo, por lo que, además de las propiedades de los Vega, está amasando una fortuna en tierras y oro a costa del sufrimiento de muchas otras familias californianas.

Esta situación ha provocado que algunos campesinos de la zona, cansados de su situación y del porvenir que les espera, usen máscaras negras y proclamen ser el Zorro, una figura popular de la región, que siempre ha acudido en ayuda de los necesitados. Gómez y su ejecutor Borrow no harán mucho caso de esto, a pesar de que castiguen de modo severo a cada persona que ven con una capucha o que intenta dibujar el símbolo del Zorro en alguna pared. Para ellos el Zorro es solamente una figura del folclore, y nada impedirá que amasen más fortuna de la que ya tienen, pues, cuando se proclame por fin la Constitución de California, Gómez quiere tener atado y bien atado todo lo que legalmente proteja las propiedades que ha conseguido a base de extorsión y sangre.

Así las cosas, el regreso de Don Vega, el legítimo heredero de las propiedades que injustamente posee Gómez, tendrá que lidiar con muchos frentes abiertos. Por una parte, recuperar lo que por derecho le pertenece, y además de eso, luchar contra la injusticia que su pueblo está sufriendo. No encontrará una manera mejor de llevar a cabo eso que bajo la identidad del Zorro, esa figura que ya en su infancia le fascinaba, cuando escuchaba las historias que le contaban sobre él y sus hazañas. Con una excelente formación militar, Don Vega posee lo necesario para ser un luchador feroz y un buen estratega, y tendrá por fin acabar con la tiranía de Gómez. Ahora bien, como todo héroe que se precie, Don Vega deberá afrontar amenazas de todo tipo en su camino, y únicamente leyendo esta historia podréis saber qué dificultades tendrá, y hasta dónde estará dispuesto a llegar para conseguir sus objetivos. 

¿Qué valoración merece el trabajo del autor? Ya conocéis mi criterio en este tipo de situaciones, donde una misma persona de ocupa de prácticamente todos los aspectos creativos del cómic. Por la dificultad de proyectos así, tiendo a ser más benévolo con la valoración si la obra no me ha terminado de gustar del todo. Pero en un caso como éste no es necesario, porque el trabajo de Alary me ha dejado muy satisfecho en todos los aspectos. Empezando por el guion, la historia mantiene una buena progresión narrativa y es entretenida, mostrando esa situación difícil que atraviesan los californianos humildes, y que, para no sentirse perdidos del todo, recurren al mito del Zorro para intentar avivar la llama de la esperanza. Por otra parte, el camino de Don Vega en su búsqueda de venganza está bien orquestado, y tendrá varias ocasiones de mostrar sus virtudes combativas. También quedan bien retratada la codicia de Gómez o la crueldad de Borrow, quedando una buena perfilación de los personajes principales. 

En lo referente al apartado visual, Alary también rinde a un muy buen nivel. Quizás (esto ya es una cuestión de gustos) flaquea un poco en las escenas de lucha a espada, por la sensación de poca fluidez de las mismas, como si faltara alguna otra viñeta intermedia entre una escena y otra. Pero al margen de eso hay un buen trazo, se trabaja bien el fondo en muchas viñetas, y eso es algo que valoro positivamente. Hay un buen equilibrio entre textos y narración visual, y eso redunda en una buena lectura. Me ha gustado ver algún que otro guiño a la película de 1998, como esa viñeta en la que dos niños estallan de felicidad al ver al Zorro. 

En cuanto al color, es aquí donde más ha acudido a mi mente el trabajo de Bonhomme en "El hombre que mató a Lucky Luke", por la forma que Alary elige de jugar con los colores, ya sea para delimitar escenas del presente con flashbacks del pasado, o bien para centrar el interés del lector en cosas concretas dentro de muchas viñetas. También hay gran presencia de colores oscuros en diferentes apariciones del Zorro, ofreciendo el cómic una buena gama de alteraciones en el uso del color, y queda un resultado bastante bueno.

¿Merece la pena el cómic? Vamos a ir grabando la marca del Zorro en la pared porque SÍ, merece la pena. Estas historias, en las que hay un pueblo indefenso y desmoralizado por algún acaudalado gobernante y su avaricia, son atemporales, como también lo es la necesidad de encontrar esperanza para poder resurgir. En este cómic, los californianos depositan su fe en uno de sus héroes, el Zorro, quien siempre ha estado ahí en los momentos de mayor sufrimiento, para luchar por ellos. Es por ello que os animo a disfrutar de esta lectura, pues envejecerá bien con el paso del tiempo, podréis sentir empatía por muchos de los personajes, y, si os gusta el Zorro, no os dejará indiferentes el tratamiento de Alary al personaje. 

Por último, y respecto de la edición, Nuevo Nueve vuelve a presentar un excelente formato en cartoné, con un marcapáginas de tela, que le da un toque de elegancia a la edición. Y esto es todo por mi parte, si queréis ver más reseñas mías podéis hacerlo aquí. ¡Hasta otra y viva el Zorro!