Este relato fue premiado el 13 de octubre de 2015 como "Relato de oro" en el concurso "Relatos de cowboys - El extraordinario Oeste" organizado por "El Círculo de Escritores". Podéis ver el premio clickando aquí. Espero que disfrutéis del relato, el cual empieza a continuación.
De lo que se siembra se recoge.
Un disparo en el desierto
De lo que se siembra se recoge.
Y en la existencia de Shane “La Parca” Wallace, los
méritos se iban acumulando para recoger algún día un vendaval de dolor y
sufrimiento. El revólver de Shane aún estaba humeante tras haber sido
disparado, y los buitres empezaban a acechar a la víctima del disparo.
La vida en los polvorientos desiertos del oeste se
resumía así: muerte, animales carroñeros, y enormes rocas que si hablaran
serían confidentes de demasiadas muertes a punta de pistola. Sin lugar a dudas,
muchas de esas confesiones tendrían a Shane como autor de las muertes. Era
incapaz de recordar la razón por la que había cometido su primer asesinato,
pero desde aquel bautismo de muerte que le había convertido en un demonio en la
tierra, la lista de víctimas no había dejado de crecer. Eso había hecho que
casi todo el mundo le temiera, desde campesinos a prostitutas, pasando por
agentes de la ley y otros forajidos. Incluso en los tiempos en que había
actuado con una banda de forajidos, ellos habían acabado abandonándole,
temerosos de no ver un nuevo amanecer si osaban contradecirle.
Shane únicamente había encontrado una persona que no
le tuviera miedo, Richard Brown, un cazarrecompensas que llevaba un año tras
él. Aunque se habían encontrado en más de una ocasión, no habían logrado
causarse más daño que unas heridas que ahora eran cicatrices en sus cuerpos. Richard
había sido un digno rival. Pero ahora se encontraba tirado y sin vida frente a
Shane, y los buitres ya le estaban picoteando. Esos carroñeros habían aparecido
de la nada, y estaban disfrutando del banquete. Aunque Shane disfrutaba del
espectáculo, un pensamiento preocupante se repetía en su mente: él sería el
próximo plato del menú. Fue entonces cuando los sucesos de las últimas horas se
agolparon en su mente.
Shane se había cogido una cogorza de tintes épicos
en la cantina del último pueblo donde había parado. A pesar de que su sentido
de la alerta le desaconsejaba beber demasiado…se le había ido la mano con el
bourbon. Y Richard le había cazado en aquella cantina, dejándole inconsciente
con la culata de su revólver. Lo siguiente que Shane recordaba…era haberse
despertado en el desierto, de forma distinta a otros amaneceres: estaba enterrado
en la tierra, y únicamente sobresalían de ella su cabeza y su mano izquierda. No
sentía el resto del cuerpo, y su boca estaba atada con un pañuelo. Richard estaba
sentado frente a él con una enorme sonrisa. Fue él quien rompió el silencio, ya
que Shane no podía hablar:
- Te preguntarás por qué he decidido
enterrarte aquí. Pues bien, aunque la recompensa por tu cabeza es demasiado
suculenta, he decidido dejarte morir en un lugar semejante a aquellos en los
que has quitado tantas vidas. Tras capturarte, te metí dentro de un saco y lo
até lo más fuerte que pude con varias cuerdas, dejando únicamente fuera de él
tu cabeza y la mano con la que disparas. Y esto es lo que haré Shane, voy a
colocarte tu revólver en la mano, pero te advierto que sólo he dejado una bala
dentro. Te sugiero que la guardes para volarte la cabeza cuando veas a los
buitres rodeándote.
Richard colocó el revólver en la mano de Shane, y con una
inclinación de cabeza, empezó a alejarse lentamente y riendo. Shane, enrabietado, y en un acto
nefasto para sus intereses futuros, logró apuntar el revólver y volarle la
cabeza a Richard. Horas después de matarle, los buitres empezaron a rodear a
Shane, que intentó inútilmente suicidarse con el revólver descargado.
Excelente. Muy buena la introducción del “Cazarrecompensas” Personaje épico en las novelas del oeste. Y me ha encantado la vuelta de la historia en los últimos párrafos donde descubrimos la realidad, y la estupidez de Shane de dejarse vencer por el ansia de venganza en lugar de reservar aquella última bala para él. Ahora sufrirá una muerte lenta mientras es devorado vivo.
ResponderEliminarUn abrazo compañero. Te espero en el Saloon.
¡Hola vaquero! Efectivamente, el cazarrecompensas es un papel imprescindible en muchas historias del oeste. Qué épicos eran los duelos o los cruces de palabras con los forajidos a los que perseguían. Me alegra que te haya gustado mi aportación al género, estaba muy estimulado ante el reto. Sin lugar a dudas la venganza le ha costado cara en esta ocasión a "La Parca", que ha alargado así el dolor que tendrá su existencia.
EliminarVe pidiendo un bourbon compañero, y que arranque la pianola.
Magistral esa vuelta de tuerca que no se espera por lo inédito. Creo que es un relato estupendo.
ResponderEliminar¡Felicidades!
¡Saludos compañero! En muchas ocasiones, y sobretodo en el oeste, vemos que acaban ganando el bueno o el malo según sobre quien gravite la historia. Pero.. ¿y si ninguno gana? Así que me alegra haber aportado un toque distintivo a este género que tanto me atrae. Gracias por pasarte y compartir tus impresiones.
Eliminar¡Un saludo!
A mi me parece que si que gana alguién...Los buitres...Jajajaja.
EliminarAbrazos compañero...y por cierto ya tienes el bourbon en la mesa del saloon.
Muy cierto Oscar jaja, vaya festival van a darse ese día. Voy a por ese bourbon, un abrazo.
EliminarUna mala decisión que le costará mucho sufrimiento antes de morir. Me ha parecido muy original. Genial.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola vaquera, sin duda esa decisión, fruto de un acto impulsivo y lleno de rabia, le va a reportar un final que dados sus antecedentes... se había estado labrando. Gracias por sacar un rato para leerme y comentarme tu valoración.
Eliminar¡Otro abrazo!
Este es un territorio sin ley, y por lo que veo, ha sido conquistado por el western terrorífico. Dos grandes personajes enfrentados en una lucha a muerte. Una resolución muy interesante en la que un hombre debe tomar una difícil decisión.
ResponderEliminarMuy bueno compañero de celda
Saludos de celda acolchada Santiago. Sin lugar a dudas, estos tipos no están predestinados a finales demasiado felices por los caminos que escogen. Me alegra haber podido aportar un toque diferencial en el final, sobretodo dándole a la historia unas gotas de terror.
Eliminar¡Un abrazo!
Me hiciste recordar a una pelicula que vi con mi abuelo hace muuuuuuchos años, tenia una escena parecida a la que describes. Si no me equivoco el heroe era un ciego.
ResponderEliminarMe gustó mucho el relato, mucho suspenso y una escena clasica de cowboyada, el ambiente perfecto y los buitres, bueno a los buitres solo queda decirles :"servido".
Saludotes!!!!
Vaya, así que sin tener sospecha alguna, te he hecho aflorar un recuerdo de la infancia, eso está bien :) Creo que el final tenía muchas papeletas para gustarte, me gusta que así haya sido. Toda la razón, los buitres se dieron un atracón y aún les quedaba el postre...
Eliminar¡Otro saludo vaquera Mendiel!
Pobre hombre, claro que el otro también es pasto de los buitres. Aquí no sale nadie con vida. Muy buen relato José Carlos. Un abrazo
ResponderEliminarHola Mercedes, en este caso, nadie gana (o como dijo Oscar, ganan los buitres). Casi siempre salen el bueno o el malo indemnes, salvo en este caso :) Me alegra que te gustara. ¡Un abrazo!
EliminarUna decisión motivada por el odio que le costó un gran sufrimiento. Terrible final. Excelente relato.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola Mirna, bienvenida por la burbuja, creo que es tu primer comentario en este blog :) En efecto, el odio y la impulsividad de su acto le serán premiados a Shane con un final duro, pero merecido por la vida que ha llevado. Gracias por leerme y dedicarme unas palabras.
Eliminar¡Otro abrazo!
Ya lo dices en la primera frase del relato... "De lo que se siembra, se recoge", síntesis perfecta de la esencia westerniana del texto. Y tras una excelente introducción, magnífica presentación de los personajes y puesta en escena, nos revelas una genial historia donde "bautismo de muerte convierte en demonio al hombre"... Dos cowboys se enfrentan a sus propias decisiones, solo los buitres carroñeros disfrutarán de la venganza y la maldad que imperan en estos dos pistoleros faltos de moral y cordura. Muy grande, José Carlos.
ResponderEliminar¡Abrazo, Compañero de Celda!
¡Vas a sacarme los colores vaquero! Esa frase inicial se me grabó a fuego en la mente cuando me enteré de lo del concurso del oeste, y me pareció perfecta para iniciar el pistoletazo de salida. Es una gran satisfacción leer por tus comentarios que he logrado retrotraerte a esa época y caracterizar a estos polos opuestos (ya sabes que con el límite impuesto de palabras es un reto enorme contar lo necesario). Esos buitres van a darse un gran homenaje, si tuviera línea directa con Morricone le pediría algún tema para cerrar el círculo tras las últimas palabra... :P Gracias por pasarte y compartir tus impresiones.
Eliminar¡Otro abrazo Compañero de Celda!
Muy buen relato, con ese final inesperado y demoledor.
ResponderEliminarUn saludo!!!!
Hola MªJesús, bienvenida por la burbuja :) Me alegra que el final haya sido de tu agrado, con estas cosas uno nunca sabe qué recepción tendrá el modo en que se remata la faena :)
Eliminar¡Otro saludo!
HOLA JOSÉ HERMOSO MICRO RELATO, ESTA LLENO DE VISUALIZACIÓN, QUE LLEVA LA MENTE DEL LECTOR HASTA EL MISMO DESIERTO Y DEJAS VER LA ESCENA, EN VIVO Y EN DIRECTO, ES COMO EL DISPARO DE Shane, EXCELENTE TRABAJO AMIGO. FELICIDADES.
ResponderEliminarHola Mario. En primer primer lugar, bienvenido al blog. Una de las intenciones al escribir la historia era poder acercar ese desierto a toda persona que me leyera. Me alegra haberlo logrado, y si encima todo el conjunto te ha gustado, no se puede pedir más en lo que a ti respecta.
Eliminar¡Gracias por la felicitación y un saludo!
Sencillamente grandioso, José Carlos!! Creo que reune todos los ingredientes para ser calificado así. Tensión, una ambientación estupenda, una gran historia y capaz de enganchar desde la primera línea. Has demostrado que estos duros asesinos del Oeste siguen teniendo su tirón... Enhorabuena!!
ResponderEliminarUn abrazo y feliz tarde de domingo!!
Buenas tardes Julia. He intentado meter en la coctelera los ingredientes que sabiamente has mencionado, y que conforman elementos clásicos de este género. Estos tipos duros al final tienen muchas veces los finales que se merecen por la vida que eligen. Gracias por pasarte a leerme :)
Eliminar¡Otro abrazo y feliz domingo!
Vaya final más escalofriante. Vaya manera de morir. Horrible.
ResponderEliminar¡Mucha suerte!
Un abrazo grande.
Hola Sue. Sí, es un final que se ha ido labrando "La Parca" con sus actos, y por ello bien merecido aunque como dices escalofriante. Estos buitres...
Eliminar¡Gracias, suerte a ti también y otro abrazo!
Me encanta, sobretodo el final. :) ¡Suerte, compi!. Un abrazo.
ResponderEliminar¡Gracias Soledad! Falta que te animes tú también a presentar algo al concurso. Si es que en el oeste puede pasar de todo :P
Eliminar¡Un abrazo!
¡Ay! El Final... Ese Final tan directo que haces que te quedes con cara de O.o en plan "¡Oh! ¿Oh? ¡Qué pava, joder!", porque es tan directo que no te das cuenta en sí... Es abrupto y árido con lo va a ser la futura tumba del Prota...
ResponderEliminar¡Realmente Bueno! ¡José Carlos! ¡Muy Bueno!
La forma en que vas hilando cada acontecimiento, rememorando esa borrachera infernal que termina siendo la verdadera Parca ;P
¡Me encanta lo del la última bala!
¡Super Besines! ^w^
¡Hola Campanilla! Pues te confieso que aunque era el final que tenía pensado sí o sí para la historia, no sabía cómo iba a ser recibido por la gente que me leyera, y es muy agradable ver tantas críticas positivas a pesar de la crueldad del final.
EliminarPor otra parte, me anima también ver que te ha gustado la forma de unir la escena final tras el paso intermedio por la situación que dio paso a ella. Cada bala vale su peso en oro en esta historia, no cabe duda, y hasta la Parca acaba necesitándola...
¡Besos!
Bienvenida a la burbuja, siempre es un placer escribir y leer a nuev@s visitantes. Si además te ha gustado la historia, no se puede pedir más para tu primera visita. Espero que lo que vayas explorando del blog sea de tu agrado.
ResponderEliminar¡Un saludo!
Me ha encantado. Yo lo describiría como un wéstern Tarantinesco. El inicio con esa frase que resume toda la historia, la descripción del malvado Shane, y luego la del cazarrecompensas, la situación en la que se encuentra, con el cadáver de Richard y luego el cómo se ha llegado a esa situación. Una estructura inteligente, que nos mantiene pegados a las letras aunque sepamos como ha acabado todo... aunque no cómo va a acabar. Finalmente desvelas lo sucedido y en la horrible situación en la que se encuentra Shane por la estupidez de sus actos, por su afán vengativo y ansias de matar. Una escena que he vislumbrado a la perfección y me encantaría ver en una peli.
ResponderEliminarEn sescientas palabras (más o menos), has creado dos personajes bien definidos.
Un abrazo, Compañero.
Saludos Ricardo, teniendo en cuenta la gran película que rodó Tarantino en su primer western, es todo un halago que veas mi relato de esa forma. Esa frase inicial se me metió en la cabeza y era una de las cosas que sentía la necesidad de escribir sí o sí. Shane merecía un final acorde con su paso por la vida, de eso no cabe duda. Y como has podido ver, al final me ha salido una narración con una estructura similar a la historia del espejo. La foto final sin duda ayuda a sentir como muy real el final que acontece, sólo faltaría poder oír un repetido "clic" del revólver al quedarse sin balas.
EliminarComo has dicho, crear en 600 palabras una historia e intentar definir bien a los personajes, ha sido todo un reto, me alegra ver que te he gustado la experiencia en este desierto :) ¡Otro abrazo!
Muy buen relato y muy original. Mucha suerte :)
ResponderEliminarUn saludo!
¡Hola Raquel! Gracias por pasarte a leer el relato, por compartir tu opinión, y por desearme suerte :)
Eliminar¡Un abrazo!
original y cargado de fuerza. Lo que hace no usar el cerebro... Muy bueno
ResponderEliminar¡Hola Paola! Bienvenida a la burbuja literaria :) Pues sí, a veces hay actos impulsivos que tienen su importancia en momentos clave. Una pena para Shane que lo descubra un poco tarde...
Eliminar¡Un saludo y gracias por comentar!
Vaya tipo tonto, que muerte aún más horrorosa por saciar su sed de venganza.
ResponderEliminarOriginal y bien contada, felicidades
Saludos Conxita, sin duda este es un tipo de persona que se deja guiar más por las emociones que por la razón, y en este caso sufrirá las consecuencias. Me alegra que te haya gustado, gracias por leerlo y comentar :)
EliminarEmocionante relato en el que al final ambos terminan siendo víctimas de sus malas decisiones.
ResponderEliminarSaludos.
Hola Felipe, efectivamente las malas decisiones de cada uno alimentan sus distintos finales, y "La parca" tendrá tiempo de recordar su error y a sus víctimas mientras muere lentamente.
EliminarUn saludo.
Excelente!!! Me ha dado escalofríos ese final. Muy bueno, José!!
ResponderEliminar¡Hola Federico! Hace poco por curiosidad releí el texto, y aunque al principio la última foto no me convencía mucho, pienso que lejos de no ser idónea, ayuda mucho a aumentar la tensión. Gracias por pasarte y comentar.
Eliminar¡Un saludo!
Una trama muy bien llevada, conteniendo la tensión narrativa hasta ese final original e inesperado y que nos deja con la duda de que habríamos hecho cada uno de nosotros en lugar del protagonista ¿venganza o muerte rápida?. Gran relato José Carlos, merecedor de ese primer premio. Un saludo.
ResponderEliminarHola Jorge, bienvenido a al blog :) Gracia por tu comentario y por verme como justo ganador del concurso del oeste :) La verdad es que es una de las ideas, dar que pensar sobre las 2 elecciones posibles. Es cierto que lo fácil (y posiblemente lo más idóneo) es guardar la bala para el final, pero algunas personas no soportan que se rían de ellas y se dejan llevar por la furia y tensión del momento. Como viste, Shane pertenece a este segundo grupo jeje.
Eliminar¡Un saludo!
Narrativa impresionante, calidad unica, hiciste que con cada palabra se fueran pasando las imágenes en mi mente, relato buenísimo y el final es verdaderamente magistral no es un final de plástico sino verdaderamente como salido de la boca de un revolver
ResponderEliminarHola y bienvenido al blog Anto. Es la primera vez que leo un comentario tuyo por aquí y la verdad, es un placer enorme que me dediques tan buena crítica. Aunque el western me gusta mucho en cuestión de cine y series, no había escrito nada sobre el género hasta este relato. Me supuso un gran reto transmitir las emociones o la historia del protagonista y su rival, y me alegra haberlo logrado. Estamos acostumbrados a que en estas historias siempre gane el bueno o el malo, así que me dije... ¿por qué no perder los dos?
EliminarUn saludo y espero volver a leerte Anto.
Bueno, primero de nada darte la enhorabuena por el premio. Lo cierto es que el relato lo merece. Primero porque está muy bien escrito, con el tono y ritmo perfectos para la historia que cuentas. Tiene esa cadencia que le va al género. Segundo, porque hablas de personajes. Para mí es lo más importante en una narración, crear personalidades únicas. Es cierto que tienes poco tiempo para desarrollarlos, pero veo que con alguna pincelada ya has dibujado a Shane, haciendo que podamos tenerle cierta empatía.
ResponderEliminarY tercero, el final es muy bueno. En un relato corto, el final suele ser muy importante, y tú logras darle un giro muy interesante a la par que realista.
Genial compañero. Veo que pisas muy fuerte en esto. ¿tendremos que llamarte a partir de ahora J.C. Shane?
Hola Alejandro, gracias por felicitarme. Aunque el género me gusta mucho, no había escrito nada al respecto, y no sabía si las ganas de estrenarme aquí me jugarían una mala pasada, pero me alegra leer tantas opiniones buenas como la tuya. Es cierto que desarrollar los personajes es parte importante de la narración. En cuestión de microrrelatos o relatos cortos, hay que intentar echar el resto en los personajes o en la historia, aunque lo idóneo es lograr el equilibrio.
EliminarAunque el final lo tenía más claro que el desarrollo antes de escribir el relato, pensaba en el golpe de efecto de que nadie saliera ganando aquí (salvo los cuervos como decía Oscar en un comentario).
Estoy compartiendo en poco tiempo más historias de las que imaginaba al abrir el blog, y es muy alentador todo el apoyo y ánimo que estoy recibiendo. Bueno, mientras no me pase al lado oscuro y me gane un final rodeado de cuervos, podrás llamarme así en alguna ocasión jaja.
¡Un abrazo y vuelve pronto a las letras en tu blog!
Por más que te lea, creo que jamás dejarás de sorprenderme. He leído con música del oeste que, sin lugar a dudas, le ha venido que ni pintado. Al menos desde mi punto de vista jeje. Me ha gustado mucho, me he metido dentro de la historia, he sentido que estaba en el desierto donde tantas muertes había propiciado Shane, y en la taberna donde cometió el peor error de su vida. Me ha recordado a aquellas películas del oeste en las que el mejor pistolero de todo el lugar terminaba mal, pero no sin antes de llevarse por delante una vida más. No puedo decir nada negativo porque no lo hay.
ResponderEliminarEs el mejor relato que he leído *-*, no me extraña que ganaras el primer puesto del concurso ;)
Saludos <3
Hola pistolera, me alegra mucho seguir sorprendiéndote. Siempre hace más absorbente la lectura elegir una música acorde, y poder ver imágenes que hagan referencia al texto, así que bien hecho por tu parte el escoger música del oeste :)
EliminarComo has comprobado, Shane tenía más que ganado su mote, e incluso en su último día de vida, y dejándose llevar por un impulso fatal, acabó con otra vida. Has hecho bien en recordar esas películas, donde esta gente hace méritos para tener el tipo de finales que tiene.
Un placer leerte tan buena opinión de la historia y de las sensaciones que te ha despertado. ¡Un saludo!
Un relato que no traslada al lejano oeste. El final inesperado pero autentico. Un abrazo
ResponderEliminarEl oeste es un género que me encanta en cuanto al cine, pero no me había atrevido a escribir nada al respecto hasta que participé en un concurso, y fue una experiencia muy divertida. De hecho volveré a escribir más historias de ese género :) Me alegra que el final te gustara.
Eliminar¡Un saludo pistolera!
Muy buen relato. Merecedor sin duda de haber ganado el concurso. Felicidades.
ResponderEliminarHola Arecibo, gracias por tus palabras. Fíjate que haberme estrenado en un género como este que me gusta ya era un premio, pero ganar el concurso ya fue genial. ¡Un saludo!
EliminarDon Jose Carlos, debo felicitarlo: en pocos párrafos logra describir una larga pero apasionante y, la vez, salvaje historia de aventuras entre dos grandes pistoleros; me quito el sombrero tejano de mi cabeza en reverencia a tanta calidad. Y lo más espeluznante del caso es que ocurre en los últimos instantes de vida de dos individuos de mal vivir y la enseñanza es esta: lo que siembras tú cosechas, por muy hábil y tramposo/a que seas. Es un placer haber recibido una crítica favorable a mi historia de parte de usted. Hasta pronto.
ResponderEliminarMuchas gracias por tan gentiles palabras Alberix, es un placer haberte sorprendido gratamente :)
EliminarLo cierto es que la idea de plasmar esta historia que me vino a la mente fue la que has resumido, y no es otra que el hecho de que lo que se siembra se recoge tarde o temprano, da igual quien seas. Además, el salvaje oeste no se ganó ese apelativo por nada, así cada individuo obtiene un final su pase a la otra vida de un modo acorde a sus méritos.
Te saludo con el sombrero y si vuelves a escribir un western será un placer leerlo, hasta pronto.
Estimado primo José, qué buen relato. Me encantó. Ese final es asombrooso y deja al lector con la boca abierta: es inesperado y perfecto. Muy boludo Richard.
ResponderEliminarAhora bien, si es este un microrrelato, los míos de ciento cuarenta palabras ¿qué son?, ja.
Saludos.
Saludos Raúl, gracias por pasarte y compartir tus gratas impresiones. La verdad es que cuando escribí el final supe que era la mejor forma de rematar la faena, el broche de oro que merecía el personaje por ruin, asesino y malvado.
EliminarFíjate que llevo un tiempo guionizando este texto para convertirlo en cómic, y ojalá logre con mi compañero dibujante el que nos lo publiquen :)
Sobre tu pregunta...jajaja, también son microrrelatos hombre, ya sabes que en el fondo la extensión varía, y muchas veces nosotros les ponemos la etiqueta al comparar el número de palabras con otros relatos más extensos que hayamos publicado. De hecho también puedes encontrar en el blog micros con un límite parecido al que mencionabas :) ¡Otro saludo!