¡Saludos desde el mundo de la investigación de lo paranormal! Para quienes habéis seguido mis primeras reseñas de las aventuras de Hellboy, no os pillará de sorpresa que la obra objeto de análisis hoy, esté más centrada en la agencia para la cual ha trabajado durante largo tiempo la creación más famosa de Mike Mignola. Y para quienes no me conocen, les invito a acompañarme en mi valoración de "AIDP: Integral 1" de Norma Editorial, porque merece y mucho la pena esta serie.
No es ningún misterio el hecho de que en los cómics, al igual que sucede en el mundo del cine o las series, todo lo que vende, si contiene elementos o personajes que han cautivado al público y generen interés, puede tener su oportunidad fuera de la serie principal. Este fenómeno de los "spin off" lleva muchos años en funcionamiento en el mundo de las viñetas, pues las editoriales tienden a aprovechar y expandir todo aquel contenido que, despertando el cariño de los lectores en una colección concreta, termina teniendo su oportunidad de demostrar su valía (y rentabilidad claro, que esto no deja de ser un negocio) en otra serie distinta. Como gran ejemplo de esto tenemos el caso de AIDP, serie surgida a raíz de Hellboy, y que desde sus inicios ha demostrado que merecía la pena tener esta oportunidad de que el mundo conociera sus aventuras sin contar con el gran Hellboy entre sus filas. Ojo, a estas alturas son muchos los spin off que hay en este universo creado por Mike Mignola, donde podemos encontrarnos a algunos como "Bogavante Johnson" o "Sir Edward Grey", pero AIDP fue el que vino primero, y su éxito a día de hoy es incuestionable.
¿Cómo se llegó al punto de dedicar una serie propia a AIDP? Por poneros un poco en antecedentes, en las primeras historias publicadas de Hellboy, que son "Semilla de destrucción" y "Despierta al demonio", se nos contaba por una parte el modo en que Hellboy llegó a nuestro mundo, y también se nos hacía saber que el personaje formaba parte de la "Agencia de Investigación y Defensa de lo Paranormal", una entidad que se dedicaba a combatir amenazas paranormales a lo largo y ancho del globo terráqueo. Una de las particularidades de la agencia, es que cuenta entre sus filas con otros personajes tan peculiares como el propio Hellboy, tanto por su aspecto como por sus poderes y habilidades, y así en esas primeras historias de la cabecera principal podíamos conocer a Abe Sapien, Kate Corrigan y Liz Sherman. Gracias a la historia de "Casi un coloso", también se ganó el derecho a formar parte de la agencia el homúnculo Roger. No obstante, Mignola quería contar historias de Hellboy en solitario, y fue la razón por la que, tras la historia de "El gusano vencedor", dicho personaje decidió abandonar la agencia. Como la idea con la AIDP era precisamente la opuesta, la de contar historias en grupo, la decisión estaba clara a nivel editorial: se le daría una colección propia. Y así fue como se llegó a esta situación. Que surgiera esta cabecera tenía además otro efecto considerable, pues permitió la participación de una enorme cantidad de artistas en sus comienzos, ya que Mignola no podía estar en todas partes ni ocupar todos los puestos creativos para seguir ampliando su universo.
¿Qué autores han participado en este cómic? Lógicamente, el gran impulsor es Mike Mignola (conocido entre otras cosas por "Batman: Luz de gas" o "Drácula de Bram Stoker"), creador de la agencia y Hellboy, y siempre presente en un rol u otro en las obras de este universo. Aunque su labor aquí es mayormente como guionista, también hace sus aportaciones en cuanto al dibujo. Además de él, tienen mucha presencia el ilustrador Guy Davis (dibujante en "Batman / Edgar Allan Poe: Nunca más" y artista completo en "The Marquis") y el colorista Dave Stewart (muy ligado al Mignolaverso con series como "Bogavante Johnson" o "Sir Edward Grey: Cazador de brujas"). Y por mencionaros otro nombres, participaron gente como Geoff Johns, Ryan Sook, Cameron Stewart, Scott Kolins, Matt Smith o Michael Avon Oeming. La traducción al castellano es de Carles M. Miralles.
¿Qué historias nos encontraremos aquí? Como el tomo contiene historias largas y otras cortas, os dejo aquí la descripción editorial:
"La serie salida de las páginas de Hellboy, recopilada por primera vez en volúmenes integrales de lujo.
La oportunidad perfecta para hacerse con esta serie creada por Mike Mignola en la que seguiremos las aventuras de la Agencia de Investigación y Defensa de lo Paranormal.
Aventuras en el universo de Hellboy protagonizadas por personajes tan interesantes como Liz Sherman, Abbe Sapien, Johann Krauss o Roger."
El tomo se inicia con "Las tierras huecas", la primera historia de gran extensión, y que sirve además como un fantástico arco de presentación de los personajes, tanto para quienes no hayan leído Hellboy, como para los que sí (en este caso, esta historia iría más o menos tras "Casi un coloso"). En las primeras páginas veremos a Liz Sherman llegando a una especie de templo bastante perdido, pues quiere encontrarse a sí misma y comprender y manejar mejor su poder de piroquinesis. Por otra parte, también se nos va presentando la sede de la AIDP, donde acaba de aterrizar Johann Krauss, un nuevo agente. Allí estarán ya Kate Corrigan, que será la que haga de guía a Krauss, y Abe Sapien y Roger (aunque éste tardará en aparecer).
A raíz de un fenómeno extraño, el equipo de la AIDP terminará llegando al templo donde se encuentra Liz. Allí encontrarán su cuerpo, que parece carente de alma, y descubrirán algo más oscuro bajo la tierra, por lo que Abe, Roger y Krauss deberán investigar al respecto mientras buscan el alma de Liz. No quiero contaros más, excepto que en esta historia, al margen de la trama principal, habrá distintos flashbacks de los miembros de la agencia que tuvieron relación con Hellboy, que ha dejado un gran vacío al abandonar la AIDP. Como complemento de este arco argumental, vienen unas pocas páginas dedicadas a contar el origen de Johann Krauss, y cómo pasó de ser un habilidoso médium a una forma ectoplásmica.
Después de eso, y siguiendo un poco el espíritu de Hellboy cuando viaja por el planera, vienen "El alma de Venecia" y unas cuantas historias de corta extensión, que sirvieron para ver qué podían aportar diferentes equipos creativos de autores al mundo de AIDP. Hay cabida para ver a los agentes mientras afrontan peligros y situaciones paranormales, razón de ser de la agencia. Pero el colofón de este tomo es la historia de mayor extensión, titulada "Una plaga de ranas". Aquí se produce la mayor conexión con la serie de Hellboy, pues, a raíz de los sucesos acaecidos en Cavendish Hall (mansión vista en "Semilla de destrucción"), en los que tuvo un papel indispensable el villano Rasputín, se inicia la primera gran trama río que podrá verse en esta colección, donde todo el equipo deberá afrontar una amenaza relacionada con hombres rana. Es mejor no contar nada más allá de esto, creo que basta para daros un poco de información sobre lo interesante que es esta trama.
¿Qué valoración merece el trabajo de los autores? Más allá del trabajo de Mignola, me es difícil realizar un análisis individual del resto por la gran cantidad de autores que participaron, por lo que sobre ellos intentaré hablar de forma global. Empezando por Mignola, me ha gustado bastante la manera en la que, en las historias donde participa como guionista o co-guionista, sigue aportando buenas ideas (me encanta el personaje de Johann Krauss) a este universo que no existiría sin él, y donde está claro que su imaginación sigue en buena forma. Aunque muy breves, he disfrutado de los dos capítulos escritos por él y dedicados a conectar varias escenas de Bogavante Johnson y Abe Sapien con la cabecera de Hellboy, pero también me ha resultado una muy grata sorpresa la historia de las ranas, donde aparecen suficientes revelaciones como para agradecer que la historia completa no esté en este tomo, pues no acaba aquí. Del resto de autores no encuentro nada que objetar pues, aunque la mayoría hicieron historias que sirvieron un poco para que en la editorial vieran qué rumbo podría tener la serie, me lo he pasado genial siguiendo a los miembros de la AIDP en todas y cada de las misiones donde se han embarcado, y cada trama, intente seguir o no el sello Mignola, me ha dejado buen sabor por unas cosas u otras.
En el apartado visual hay que destacar por un lado el hecho de que el estilo de Mignola, si bien él apenas dibuja ninguna historia, sí que está muy presente en varias historias, pues hay más de un ilustrador que usa un trazo tan similar al de Mignola, que parece una perfecta mimetización. Es el caso de Sook, o Oeming en menor medida, quienes mantienen ese estilo que tan característica hiciera la serie de Hellboy. Luego he disfrutado mucho de lo que artistas como Stewart o Davis han aportado a este universo. De Stewart su pulcritud de trazo y el buen trabajo en el nivel de detalle en las viñetas. De Davis, quien será durante una larga temporada artista fijo en la colección, ya puede tener uno una buena muestra de lo que puede aportar, que es mucho, pues es un narrador bueno a nivel visual, y su estilo de dibujo me ha gustado. Con el resto de artistas es como todo, al ocuparse otros de diferentes historias cortas, hay un buen ramillete de opciones para que el lector pueda disfrutar más de uno o de otro, pero en cualquier caso no creo que os dejen indiferentes, pues en algún caso baja un poco el nivel estético de la serie, pero no de una forma alarmante. En cualquier caso, en líneas generales me quedo bastante satisfecho.
En el color, donde predomina la aportación del otro Stewart, que también ha estado largo tiempo ligado a este universo de Mignola, se mantiene esa buena línea ya vista en Hellboy, con gran presencia de paletas oscuras de colores, si bien en función del tipo de historia y equipo creativo, esto sufre una ligera variación, que no resta muchos puntos al notable resultado.
¿Merece la pena el cómic? Si alguien cree que por ser un spin off de Hellboy sería de inferior calidad... se equivoca, pues MOLA MUCHO. He disfrutado lo más grande con esta lectura, que no solo tiene las suficientes conexiones con la serie de Hellboy para mantener la cohesión de este universo, sino que recorre su propio camino con una soltura y un descaro que me parecen arrolladores. Es cierto que, al ser una serie que tardó un poco en encontrar su enfoque, os puede dejar contrariados al principio, pero qué queréis que os diga, un servidor ha disfrutado mucho de todas las historias contenidas en este integral, y, lejos de notar ese tanteo editorial sobre cómo orientar la AIDP y sus aventuras, me he encontrado un producto de mucha calidad, que considero lectura obligatoria si os gusta Hellboy, e imprescindible si os atraen las historias paranormales. Eso sí, conviene avisaros de que, si bien casi todos los episodios son auto-conclusivos, el último arco argumental no acaba en este integral, pues pertenece a una trama de mucha más extensión que sigue en el próximo tomo. ¿Se puede tener mejor excusa para pillarse el segundo integral?
Por ir terminando, y sobre la edición de Norma Editorial, es de cartoné, forrado con tela y con cinta marcapáginas. Como contenido extra hay textos sobre la publicación editorial y los inicios del camino recorrido por esta serie, pero además hay comentarios, diseños y bocetos de diferentes autores. Esto es todo por mi parte, si queréis ver más reseñas mías podéis hacerlo aquí. ¡Hasta otra!