26 de diciembre de 2020

Reseña de Íncubos. Un viaje intimista al mundo de Lovecraft

Saludos y felices fiestas a todo el mundo. En esta nueva entrega de mi sección de reseñas, vuelvo al terreno del terror, que ya recorrí por ejemplo en mi análisis de "Satanela". Y para revisitar este maravilloso género narrativo, la obra elegida ha sido "Íncubos" de Ponent Mon, donde hay varias historias cortas claramente influenciadas por el horror cósmico que Howard Phillips Lovecraft hizo tan popular, y que sigue siendo fuente de inspiración hasta nuestros días. 


A día de hoy es difícil que cualquier persona no sepa quién es Lovecraft. El legado que dejó el escritor americano, originario de Providence, es inmenso. Sus historias centradas en lo que se conoce como horror cósmico, han sido adaptadas a lo largo de las décadas en diversos formatos, desde películas a series, pasando por el mundo de los cómics. Y eso contando solamente los productos que son adaptaciones. Si nos ponemos a contar la de historias que se han escrito o filmado para todos los soportes anteriores, y que están claramente influenciadas por la obra de Lovecraft... podríamos tirarnos mucho tiempo y no pararíamos. Porque sí, al igual que pasa por ejemplo con Edgar Allan Poe, la popularidad de Lovecraft es atemporal, como atestigua "Íncubos", obra que capta muy bien la esencia del legado que dejó el de Providence.


Como dato curioso, esta obra fue publicada originariamente por la editorial Double-Shot, y nos llegó a tierras españolas gracias a Ponent Mon, editorial que tanto bien está haciendo trayendo a nuestro país muchas obras del fumetto italiano. Como editor y traductor de la obra está José E. Martínez, y precisamente en un texto que él escribe y podemos leer al principio, tenemos la oportunidad de saber los materiales que utiliza Michele Penco para esta obra. Pero sobre estos detalles artísticos profundizaré más adelante, cuando valore la labor del autor. Vaya por delante que lo que nos vamos a encontrar en "Íncubos", es un cómic intimista que nos hará adentrarnos de una manera fantástica por el legado de Lovecraft. 

¿Quién es el autor de la obra? Como artista completo, tenemos al italiano Michele Penco. Hasta que se publicó "Íncubos", el artista pisano había ilustrado un par de libros, y un par de juegos de cartas de tarot. Uno de esos juegos, titulado "El tarot del Necronomicón", contiene ilustraciones basadas en motivos e ideas del universo de Lovecraft. Así pues, tenía su lógica que el artista diera un paso más allá y se encargase de realizar esta obra objeto de reseña, en la que demuestra una gran destreza como artista completo al guion y los lápices. 

¿Qué historias nos encontramos aquí? Aquí os comparto la sinopsis oficial de la obra:

"Un artista víctima de una pesadilla sin fin, un pueblo habitado por criaturas monstruosas, una verdad macabra que se esconde detrás de una pintura, un hombre errante obsesionado por una figura que se le aparece en un sueño. 

Cuatro historias originales inspiradas en el solitario de Providence, acompañarán al lector en un viaje a las fronteras del sueño: El autorretrato, La ciudad sobre el océano, El modelo y El ser del sueño. 

En una adaptación libre del universo de Lovecraft, el autor induce a través de sus dibujos y textos, a explorar una dimensión oscura e indefinible de paisajes claustrofóbicos, elementos inquietantes sobrenaturales, criaturas deformes y obsesiones introducidas en la mente en un espacio onírico y melancólico."

Como podréis ver a lo largo de la obra, todas las historias están tan bien elaboradas visualmente, que dejan esa sensación de que podríamos leerlas y entenderlas sin los textos de apoyo. Y eso es una gran virtud que se encuentra en "Íncubos", porque es un acercamiento intimista a ese horror cósmico popularizado por Lovecraft, y que cobra vida en todas las páginas de este cómic.

En este punto os confieso algo, aunque he leído bastantes historias de Lovecraft, el autor no ha terminado de engancharme nunca, como por ejemplo sí me sucede con Poe. Ahora bien, sí que disfruto mucho de las adaptaciones que se hacen del autor de Providence, ya sean fieles a las obras o únicamente deudoras del horror cósmico. Es por eso que, por poneros un ejemplo, cuando John Carpenter, uno de mis cineastas favoritos, se ha acercado al legado de Lovecraft (como pasa con "En la boca del miedo"), me ha enganchado su labor, y eso mismo me ha sucedido con "Íncubos", donde Michele Penco consigue que sus historias, pese a ser muy breves, sean muy vívidas y disfrutables.


En las cuatro historias recopiladas aquí, la tónica será muy similar, pues siempre habrá un protagonista que vivirá situaciones que pondrán al límite sus emociones y su cordura. Es algo que podremos ver con el pintor que protagoniza la primera historia, pero también con el turista que termina vagando por las calles de un pueblo abandonado, así como el fan que ve la última obra de un pintor que admira, o el pobre hombre que no logra conciliar tranquilo un sueño porque siempre ve a un ser extraño en él. Y el lector acompañará en todas estas vivencias a los distintos personajes que han de padecerlas, haciendo que percibamos muy de cerca lo que ellos viven. 

¿Qué valoración merece el trabajo de Penco? Es curioso que con un apellido que hace pensar en algo malo o de poca calidad, nos encontremos con una obra tan notable, donde la narración sea tan personal y cercana que podamos sentirnos participantes activos en los horrores que sufren los personajes. Empezando por el apartado del guion, Penco hace una labor muy acertada, usando una cantidad adecuada de textos en las historias, pues una mayor presencia de diálogos o voces en off podría haber resultado abrumadora ante el enorme potencial narrativo de las imágenes, que merecen por sí solas darle una lectura a "Íncubos".

Sobre la parte gráfica, Penco utiliza para las ilustraciones tinta china, pinceles y rotuladores, y el resultado es muy impactante. Es lo que hace que la obra sea muy personal, pero que al mismo tiempo ello haga que su visión de Lovecraft nos entre rápidamente por los ojos. La narración es tan minuciosa y expresiva de lo que acontece en cada historia, que perfectamente se podrían entender todo sin textos de apoyo. 

La obra es en blanco y negro, y me parece la elección acertada. Posiblemente de haber sido a color, el impacto de las imágenes habría quedado atenuado. Así que de forma global, Penco hace un gran trabajo como autor completo.

¿Merece la pena el cómic? Desde mi experiencia como lector, SÍ. Este tomo y sus historias son una experiencia fantástica de lectura no solamente para gente aficionada a Lovecraft o los cómics de esta temática, sino para todo amante de las historias de terror, suspense y misterio. Michele Penco realiza una gran labor, que hace que en todo momento uno tenga la percepción de estar realizando un viaje intimista por el mundo que ideó Lovecraft. Así que esta obra merece que le deis una oportunidad, no os dejará indiferentes. 

Por último pero no menos importante, queda hablar de la edición de Ponent Mon, que es en tapa dura, y contiene un par de textos muy interesantes, uno de ellos escrito por el cineasta chileno Patricio Valladares, donde nos habla del horror cósmico, y otro elaborado por José E. Martínez, en el cual hace un repaso por la carrera de Michele Penco. Hasta que volvamos a leernos, un saludo. 


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