29 de mayo de 2021

Reseña de Star Wars: La senda del destino 1. Luke Skywalker intenta descubrir su camino dentro de la fuerza

¡Saludos desde una galaxia muy, muy lejana! Hace poco tiempo estaba aquí compartiendo mis impresiones de "Darth Vader 1: El corazón oscuro de los Sith", que arrancaba tras los acontecimientos de "El Imperio contraataca" desde la perspectiva de Vader. Y en esta ocasión vuelvo a ese mismo punto, para contaros cómo sigue la historia desde la perspectiva de Luke y los demás miembros de la Alianza Rebelde. Así pues, acomodaos bien en el asiento, que vamos a saltar al hiperespacio para hablar de "Star Wars: La senda del destino 1" de Planeta Cómic.


¿Os he dicho ya que me encanta "El Imperio contraataca"? Es la película de la saga de Star Wars que más me marcó en la infancia junto a "Una nueva esperanza". Pero claro, cuando uno es un niño no alcanza a saborear todos los matices de esa película, el episodio más oscuro de la trilogía clásica, que visualmente me sedujo con los planetas de Hoth, Dagobah o la Ciudad Nube. El famoso momento en el que Darth Vader le revela a Luke que es su padre... la leche, hasta que no estaba ya más crecidito no pude percibir la tensión y el dramatismo de esa escena, que parecía más bien una representación de una obra de teatro que una historia espacial. Y este cómic, al igual que su homólogo desde el lado del villano, arranca exactamente en el mismo punto, cuando Luke ha perdido su mano, su espada láser, y de pronto ve cambiar su mundo a consecuencia de la revelación sobre la identidad de su padre. 


Hay que hacer un poco de resumen para que podáis entender hasta qué punto queda tocado moralmente Luke. Ya sabréis a estas alturas que Obi-Wan Kenobi, que fue brevemente su maestro, murió asesinado por Darth Vader en un combate en la Estrella de la Muerte. Pues bien, por aquel entonces, Luke ya empezaba a tener sus primeros contactos con la fuerza. Pero la muerte de su mentor provocó que apenas pudiera progresar en su nuevo camino. No fue hasta la batalla de Hoth cuando Obi-Wan se manifestó ante él en su forma residual, para indicarle que debía ir al planeta Dagobah, donde se encontraba el maestro Yoda, que como podréis imaginar, iba a retomar su entrenamiento por el camino de la fuerza. Una vez que Luke y Yoda cruzaron sus caminos, hubo algún que otro escarceo del joven con el lado oscuro, lo cual dejaba claro que todavía le quedaba un largo camino por recorrer para lograr su objetivo de ser un jedi. Si a todo esto se le suma la revelación de que su padre es un sith, además del mayor asesino del Imperio... cómo no va a tocar eso psicológicamente a alguien. Y de eso trata este cómic, de contarnos qué sucede a raíz de eso.

¿Qué autores han participado en este cómic? Como escritor tenemos a Charles Soule (conocido por su etapa en "Hulka", o por "La muerte de Lobezno"), quien lleva bastante tiempo trabajando en los cómics de Star Wars, donde ha guionizado historias de Darth Vader, Lando o Kylo Ren además de otros personajes. El ilustrador en este caso es el español Jesús Saiz (dibujó varios números del "Doctor Extraño" de Mark Waid, o "Dos Caras: Año uno"). Al color tenemos a Arif Prianto (en SW ya ha trabajo en "Caza Tie" y "Poe Dameron"), Rachelle Rosenberg (que ya desempeñó este rol en "Hombre de Hielo: Descongelado" o "Soy Groot"), y Dan Brown (ha colaborado en "Karnak" o "La venganza del Caballero Luna"). La traducción al castellano es de Víctor Manuel García de Isusi. 

¿Qué historia nos encontraremos aquí? La sinopsis nos detalla lo siguiente:

"La Alianza Rebelde se ha visto obligada a diseminarse tras su derrota en Hoth. Para escapar del Imperio, Han Solo, la princesa Leia Organa, Chewbacca y C-3PO huyeron en el Halcón Milenario con la esperanza de encontrar refugio con Lando Calrissian, un viejo amigo de Han.

Sin embargo, Darth Vader se les adelantó y llegó antes a Ciudad Nube. El Señor Oscuro obligó a Lando a detenerlos como cebo para atraer a Luke Skywalker a una trampa y, aunque Leia lideró una fuga muy valiente, Han Solo se quedó atrás como botín para uno de los cazadores de recompensas del señor de los sith. 

Ahora, Luke está a punto de desmoronarse tras su derrota a manos de Darth Vader…"

Lo sé, es prácticamente un resumen de lo acontecido en "El Imperio contraataca", que más o menos he sintetizado antes para poneros al día. Pero no hay que olvidar que puede haber gente que todavía no viera esta magnífica película, por lo que nunca está de más un resumen. Al margen de eso, las primeras páginas del cómic rememoran esa escena entre Luke y Darth Vader, donde no solamente pierde el aspirante a jedi su mano y la espada láser, sino parte de su fortaleza mental. Una vez que Chewbacca, Lando y Leia rescatan a Luke y ponen rumbo fuera de Ciudad Nube, asistiremos a las primeras escenas donde el chico tendrá sus dudas sobre lo que le aguarda el futuro en su camino por la fuerza.

No obstante, no habrá mucho lugar a la tranquilidad, porque enseguida asistiremos a una batalla espacial entre el Imperio y una de las flotas de la Alianza Rebelde, que intenta sin éxito dar el salto al hiperespacio para reunirse con otras naves rebeldes. Por si esto no fuera poco, Chewbacca y Leia siguen sin confiar en Lando a raíz de lo acontecido con Han Solo, y los personajes deberán lidiar con esa desconfianza y con la peligrosidad de la situación si pretenden lograr salvar con éxito a las naves de la flota del bloqueo imperial. Allí conoceremos a la Comandante Zahra, que dirige el destructor imperial "Voluntad de Tarkin", y que tiene un particular interés en ver muerta a la Princesa Leia. 


Y me vais a permitir un salto en los acontecimientos (lo gracioso de la batalla espacial es que veáis el desenlace y cómo se produce leyendo el cómic) para hablar del retorno a Ciudad Nube, el que fuera durante bastantes años el hogar de Lando. Tras una visita fugaz al palacio de Jabba para ver si estaba allí Han Solo, los personajes deberán a retornar a Ciudad Nube por diferentes razones. La de Luke en concreto es intentar recuperar su espada láser, desaparecida tras el final de su batalla con Darth Vader. Con la ayuda de Lando, que sabe dónde puede encontrarse el arma, Luke deberá localizarla, si bien habrá lugar a que tenga visiones sobre lo que le aguarda en el futuro, permitiéndole salir un poco de su estado de dudas internas. Y más o menos esto es todo lo que puedo contaros, para que os hagáis una idea de lo que vais a encontrar aquí. Obviamente los fans de Star Wars descubrirán más sorpresas en el cómic, de las que he preferido no decir nada, para que os animéis a su lectura. 

¿Qué valoración merece el trabajo de los autores? Ciertamente el que este cómic se ubique al final del episodio quinto ya tenía mi curiosidad, pero el camino por el que transcurre la narración consigue además tener mi interés hasta el final. Soule escribe el retorno a Ciudad Nube, un escenario donde pasan cosas interesantes que permiten rememorar lo que ocurrió en esa localización poco antes, y también se ocupa de relatar una breve visita a Tatooine. Todo ello con un buen manejo de los tiempos, y dosificando las escenas de acción con acierto. Aunque veremos a Darth Vader, sus apariciones son breves, y están un poco condicionadas por lo que ocurre en la colección propia del personaje, para que tengamos la sensación de cierta cohesión con otras series de Star Wars. En líneas generales, me ha gustado el trabajo de Soule, que centra gran parte de la narración en Lando, y las dudas de Luke y su futuro.

Respecto a Saiz al dibujo, el español realizada un disfrutable trabajo. Se logra el efecto de que veamos en los rostros de los personajes protagonistas, las caras de los actores y actrices que aparecieron en las películas, cosa que agradezco en estos casos por la familiaridad que genera. Aparte de eso, Saiz se desenvuelve bien tanto en escenas estáticas como en las de acción. El único pero que le he encontrado al dibujo, y no es una crítica al ilustrador sino al apartado gráfico en conjunto, es que en algunas escenas, como la batalla espacial del inicio, los efectos visuales que se añaden rompen un poco la armonía del trazo del dibujo. 

En cuanto a la labor del equipo de coloristas, y recalcando lo anterior sobre los efectos visuales, no encuentro muchas más cosas que objetar, pues el color viene siendo similar al que vi en la colección de Darth Vader, y se merece una valoración positiva. 

¿Merece la pena el cómic? Si os dejáis llevar por la fuerza... descubriréis que mi opinión es que SÍ, merece la pena. Se trata de una lectura dinámica, que encuentra la senda de su destino partiendo del episodio quinto, lo que no es baladí siendo una de las mejores historias de la saga. Como tomo inicial de la serie tiene los suficientes puntos de interés para darle una oportunidad, y en mi caso particular, al final de la lectura me he quedado con ganas de más. Ya desconozco si la serie mantiene este buen nivel, lo sube o baja, pero para ello hay que esperar. Lo único que puedo decir con certeza es que ha comenzado de buena forma. 

Respeto de la edición de Planeta Cómic, el tomo es del habitual formato en cartoné, y contiene como extras las diferentes portadas de los números, realizadas por R. B. Silva y Guru-eFX. Y esto es todo por mi parte, si queréis ver más reseñas mías podéis hacerlo aquí. ¡Hasta otra y que la fuerza os acompañe!

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