26 de marzo de 2022

Reseña de El joven Hellboy: La tierra oculta. Explorando una misteriosa isla en la infancia del personaje

¡Saludos desde el mundo de la investigación de lo paranormal! A estas alturas, quienes me seguís en este espacio ya debéis tener clara una cosa... ¡me encanta el universo de Hellboy! Y dentro de ese disfrute, me gusta compartiros mis impresiones tras cada aventura que leo de personajes de este universo creado por Mike Mignola. Razón por la cual aquí me tenéis, para deciros qué me ha parecido "El joven Hellboy: La tierra oculta" de Norma Editorial. 


Una de las metas que me puse para este 2022, fue introducirme en serio en el universo de "Hellboy" para satisfacer mi curiosidad sobre estos cómics y lo que podía aportarme como lector. Y claro, al hacer eso y posteriormente hablaros por aquí de lo que me parece tal o cual cómic, espero poder serviros de filtro u orientación sobre qué títulos leer de este enorme y fantástico universo concebido por Mike Mignola. La obra objeto de reseña, que es una miniserie de cuatro números publicada por Dark Horse en 2021 y aquí en España a través de Norma en este 2022, podría servir perfectamente para una de esas guías del tipo cómo empezar a leer al personaje, con la particularidad de que veo este contenido más orientado a un público juvenil, aunque no por ello carece de interés para uno más mayor. Esto es así no solamente es así por el enfoque de la historia, sino también por el apartado gráfico de la misma, aspectos que analizaré más adelante.


La primera vez que vi a esta versión infantil de Hellboy no fue en las viñetas, sino en un fragmento de la película "Hellboy 2: El Ejército Dorado" (2008) dirigida por Guillermo del Toro. Concretamente la escena tenía lugar al principio en una base militar, donde se encontraban celebrando la Navidad tanto Hellboy como su padre adoptivo, el profesor Trevor Bruttenholm. En ese fragmento de película, Bruttenholm le contaba una historia a su ahijado, y, qué queréis que os diga, la caracterización que se hizo del personaje en esa etapa de su infancia me resultó tan simpática que, pese a no durar más de unos minutos la aparición en pantalla, le cogí aprecio. Y ésa es la principal razón de que, en este furor lector que estoy experimentando con Hellboy, me haya apetecido hincarle el diente a este cómic protagonizado por su versión infantil que, por la fecha en que os escribo esta reseña, no lleva mucho tiempo a la venta en tierras españolas. 

¿Qué autores han participado aquí? Lógicamente, uno es Mike Mignola (conocido entre otras cosas por "Batman: Luz de gas" o "Drácula de Bram Stoker"), creador de Hellboy, y siempre presente en un rol u otro en las obras de este universo. Su labor aquí es la de guionista, que comparte con Thomas Sniegoski (conocido por "Bone" o por participar en "AIDP"). Del dibujo se ocupa Craig Rousseau (que ha trabajado en series como "Harley Quinn" o "X-Men"). Y como colorista está Dave Stewart (muy ligado al Mignolaverso con series como "Bogavante Johnson" o "Sir Edward Grey: Cazador de brujas"). Traduce al castellano Héctor Lorda.

¿Qué historia nos encontraremos aquí? La sinopsis nos describe lo siguiente:

"Una aventura inédita de Trevor Bruttenholm y el joven Hellboy llena de misterio y acción.

Perdidos en una extraña isla tras sufrir un accidente de camino a una excavación en América del Sur, Hellboy y el profesor Bruttenholm se ven asediados por toda clase de monstruos… ¡por tierra, mar y aire! 

Una extraña los rescatará y resultará ser una de las heroínas de Hellboy… ¡pero no están tan a salvo como creían! 

Un antiguo mal confinado en la isla está a punto de despertar... ¡empujando a Hellboy y a sus nuevos amigos a una batalla desesperada!"

El joven Hellboy aparecerá en las primeras páginas muy contento por el hecho de que el profesor Bruttenholm lo lleve a visitar una excavación en América del Sur. Ávido de encontrarse momias y otras cosas antiguas, Hellboy no dejará de mostrar su ansia de aventuras y de ver mundo, pues, desde que llegó a la tierra tiempo atrás, no es que haya estado viviendo precisamente una vida muy pública, sino una más discreta. Esto no dejará de tener su razón lógica, como pronto descubrirán los personajes, pues, en el mismo avión donde han subido para su viaje, aparecerá un hombre que querrá matar a Hellboy, por considerarle una abominación que traerá el apocalipsis a nuestro mundo. 

Como podéis imaginar, con un pasajero así a bordo de un avión, con claras intenciones asesinas (aunque lo haga por considerarlo un deber en base a su devoción religiosa), el trayecto será de todo menos tranquilo. Esto causará que dicho avión sufra un accidente, y que Bruttenholm y Hellboy terminen llegando a un destino muy diferente del que tenían en mente, pues acabarán en una misteriosa isla, pobladas de extrañas criaturas, y donde los peligros estarán por todos lados. Entre cangrejos gigantes, extraños monos y dinosaurios (sí, y muy hambrientos), lo único que puede ayudar un poco a los personajes a seguir con vida, será la aparición de una de las heroínas favoritas de Hellboy, la piloto y aventurera Scarlett Santiago.


Hellboy ya seguía las aventuras de Scarlett a través de unas revistas en las que se narraban sus hazañas, así que para él será algo muy grande poder conocer en carne y hueso a una mujer tan intrépida y valiente como ella. Lo único curioso es que hacía tiempo que nadie sabía nada de ella, y será sorprendente encontrarla en aquella isla tan extraña, en la que la propia Scarlett llegó por accidente tiempo atrás, y donde lleva un tiempo viviendo. Pero hay más, pues ella se ha convertido en amiga de esos extraños monos que Bruttenholm y Hellboy vieron en la isla, y que no solamente habitan en ella, sino que son algo así como guardianes, cuyo fin es evitar que un antiguo mal del lugar vuelva a poner en peligro sus vidas y las del resto del mundo. Y lógicamente, tanto Bruttenholm como Hellboy, querrán saber más sobre todo eso, como también de un extraño templo ubicado en mitad de la isla. El resto de la historia podréis conocerla si leéis este cómic. 

¿Qué valoración merece el trabajo de los autores? No voy a engañaros, pues no es el guion más original ni mejor trabajado de Mignola, ni tampoco de Sniegoski. Aunque es cierto que, tanto por el tono de la historia, como por la manera de contar la misma y la velocidad con la que tienen lugar los diferentes episodios, deduzco que su intención era hacerla accesible para un público juvenil (que a fin de cuentas hay que seguir ganando nuevos lectores de cualquier franja de edad). Al tener algunas escenas violentas, y aunque por el dibujo pueda parecerlo, no es una lectura para los más pequeños desde luego, y por lo demás, la obra contiene algunos de los elementos habituales del universo de Hellboy, como los típicos misterios y las criaturas de todo tipo, y las correspondientes escenas de acción. El cómic, quizás por lo simple de su trama y los tiempos narrativos, se lee fácilmente de un tirón, y tiene como aliciente la presentación de Scarlett Santiago, personaje que, si sucede como pasó en su día con Bogavante, podría tener cierto recorrido en el mundo de Hellboy en adelante. En resumen, el guion no brilla por su originalidad, pero el trabajo de los autores es correcto. 

El dibujo de Rousseau es totalmente cartoon, aspecto que precisamente me hizo notar desde el principio el tipo de público más joven al que iba dirigido el cómic. Aunque me gusta la vivacidad y el carisma que el artista le confiere al diseño de este Hellboy joven, uno de los defectos que le encuentro a Rousseau es el abuso de primeros planos o la ausencia de fondos en muchas viñetas (que tampoco trabaja un alto nivel de detalle cuando los hay). En ese sentido, no estoy especialmente satisfecho con el resultado global del apartado gráfico. Su simpleza es cierto que contribuye a la velocidad con la que uno puede leer el cómic, pero yo personalmente (recordad, esto es solamente una valoración mía y cada persona tiene sus gustos) no habría elegido a este autor para narrar una historia de Hellboy. La única explicación que le encuentro a su elección es la de ofrecer un producto que visualmente atraiga a lectoras/es más jóvenes de lo habitual, y ahí es cierto que su trabajo puede ser pasable según el gusto de cada uno. 

El color de Stewart sirve al mismo espíritu del dibujo, y también está un tanto alterado respecto al que él suele usar en otras obras de este universo. Siendo consciente de lo mejor que el colorista puede ofrecer por haberlo comprobado en muchas ocasiones, aquí su labor no pasa de correcta sin más. 

¿Merece la pena el cómic? Se trata de uno de esos casos en los que DEPENDE DE LO QUE BUSQUES CON ESTA LECTURA para decidir si te merece la pena o no. Si, como me ha pasado a mí, te apetece leer una historia del joven Hellboy, se merece una oportunidad. Y lo mismo digo si eres completista del personaje, o directamente te apetece comenzar a leer sobre el mismo (también puedes hacerlo con "Hellboy: Integral 1" o "Hellboy y la AIDP 1952") y quieres optar por una historia de tono más juvenil. Aunque según el nivel de exigencia de cada persona, os puede interesar cualquier otra lectura de Hellboy que no sea ésta en concreto. Ya aviso de que no es una obra memorable, pero tampoco un desastre, se lee rápido, entretiene y es auto-conclusiva, por lo que ya es algo a tener en cuenta. 

Respecto de la edición de Norma Editorial, es en cartoné, y contiene en el apartado de extras bocetos y diseños de personajes, páginas, y cubiertas. Y esto es todo por mi parte, si queréis ver más reseñas mías podéis hacerlo aquí. ¡Hasta otra!

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